"No pueden secar su ropa, tienen que salir de sus tiendas para pedir un jabón o comida"
Conchi Rodríguez, voluntaria, nos cuenta cómo ha afectado la ola de frío en el campo de refugiados de Ritsona
El Diario: 'No pueden secar su ropa, tienen que salir de sus tiendas para pedir un jabón o comida'
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Madrid
Conchi Rodríguez decidió irse como voluntaria a Grecia tras ver las imágenes de los refugiados en el año 2015. En ese momento se encontraba desempleada y tenía dinero ahorrado para asumir el viaje. En su primera experiencia estuvo dos meses en el campamento de Ritsona: "Ayudar a las personas, sobre todo si has conocido su historia, te reporta más que cualquier sueldo", nos cuenta. Tanto le marcó que junto a varias voluntarias crearon la Asociación Solidaridad con Ritsona. Y volvió dos veces más. Ahora mismo está de nuevo allí, en el campo de Ritsona, a una hora de Atenas: "10 meses después de que el campamento abriera las condiciones han mejorado pero no lo que tú esperarías de Europa".
La ola de frío que ha barrido Europa ha afectado especialmente a estos centros: "Estás dentro de seis metros cuadrados, con 5 o 6 niños, sin posibilidad de secar tu ropa, teniendo que salir fuera a pedir un jabón o tupper de comida". Por eso opina que la solución no pasa por "mejorar estos campamentos", sino porque "las solicitudes de asilo de estas personas se resuelvan de un modo más ágil".
Campo de Ritsona
Campo de Ritsona
