El debate filosófico del 'caranchoa': ¿Héroe o villano?

Madrid

La semana pasada se hizo viral el vídeo del joven youtuber Sergio Soler Villa, conocido como MrGranBomba. Soler insulta a un repartidor del centro de Alicante al que llama "caranchoa", después de una respuesta amable sobre dónde estaba la zona comercial. Es su modus operandi, hacer reír a coste de bromas pesadas a personas reales, no actores. Pero esta vez le salió mal. El repartidor le soltó una bofetada. Las imágenes corrieron como la pólvora por las redes sociales. La mayoría de la gente que han comentado el vídeo le ha recriminado su actitud frente al mensajero al que insulta. Esto nos pone sobre la mesa un dilema moral sobre el que ha querido reflexionar este lunes Irene Lozano. ¿Es "Caranchoa" un héroe o un villano?

Soler, acostumbrado a hacer este tipo de vídeos, llega a un punto en el que solo piensa en el resultado final y no en las consecuencias que pueda tener la grabación. Ese es el mundo virtual, que es un mundo en sí mismo. Luego está el mundo real, lo que pasa en la calle. Este youtuber tiene la particularidad de mezclar los dos mundos. "Yo creo que él va perdiendo la perspectiva, va perdiendo el sentido de la realidad. Y cuando está interactuando con personas en el mundo real, está pensando más en su comunidad de seguidores, en si está quedado o no gracioso, en que está enfrente de una persona a la que está insultado, que tiene sus emociones y que puede reaccionar como reaccionó", ha señalado Lozano.

El repartidor supone entonces para Soler un choque con la realidad que le recuerda que los insultos ofenden. El filósofo inglés Bernard Williams, que murió en 2003, cuenta en su último libro Verdad y veracidad que en las discusiones filosóficas sobre la verdad hay altos grados de abstracción, sobre todo entre los estudiantes mas relativistas. Williams concluye que esas discusiones abstractas en las que se niega la realidad terminan con su estudiante saliendo a la calle y alguien les golpea. Entonces comprende claramente la diferencia entre un puñetazo real y uno que no lo es. Es lo que le ocurre al youtuber, que cuando recibe el golpe recobra de repende la conciencia de que la persona es real y tiene su propias reacciones.