¿No es un asesinato?

Madrid

La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e igualdad, Dolors Montserrat, publicó ayer un tuit de pésame sobre el asesinato de una joven en Fuenlabrada que decía: “Muere una mujer a manos de su pareja”. Morir a manos de es un eufemismo de ser asesinado. No es técnicamente incorrecto, como no lo es contar, si es el caso, que el asesino era educadísimo, muy trabajador y ayudaba a las ancianas a cruzar la calle. Lo que sucede es que después de décadas hablando sobre violencia de género hemos llegado a algunas conclusiones. Y la primera de ellas es que la visibilización de esta tragedia requiere llamar a las cosas por su nombre, huyendo del morbo pero sin usar edulcorantes que limen sus aristas de la barbarie.

Como sabemos que la ministra no tiene la mínima intención de maquillar esta realidad sólo le pedimos que cuide también las palabras. Y ya puestos, también se lo pedimos al presidente Rajoy que esta mañana ha dicho a las mujeres que “hay salida para vuestro problema”. También nos ha costado mucho entender y hacer entender que la violencia de género es un problema de los hombres que sufren las mujeres como para que tengamos que empezar de nuevo.