"No me dijo que se metían con él en clase por tener formas masculinas"
Gabriel, transexual de 18 años, utiliza su canal de youtube para compartir con otros adolescentes su experiencia. Echa de menos más educación al respecto en los colegios
Madrid
Gabriel es un joven transexual de 18 años, estudia y es youtuber, pero en su canal no da consejos para pasar pantallas de videojuegos. Es un activista que explica a adolescentes con dudas qué hacer cuando se dan cuenta de que el sexo que se les asignó al nacer no se corresponde con el suyo. Las preguntas le llegan desde el extranjero, pero también desde lugares más cercanos como Torrejón o Toledo. Entiende cómo se sienten porque él no tuvo información hasta tarde: "Hasta tercero o segundo de la ESO que vino COGAM a darnos una charla, yo realmente no tuve información de la diversidad que hay... Eso es lo que echo yo en falta, que desde pequeñitos se nos eduque en la diversidad".
Cuando le preguntan, él remite a la Fundación Daniela, una entidad que trabaja para apoyar a los adolescentes transexuales y a sus familias. Allí conoció a Isidro, un apoyo y ahora amigo. Su experiencia profesional fue clave para empezar el proceso de transición y entender que comentarios como marimacho no debían ser un lastre.
Marieli, la madre de Gabriel, ha hecho también su recorrido particular. Él todavía recuerda cómo le explicó su realidad: “Mi madre abrió la puerta de la habitación y me pilló vendándome los pechos. Me preguntó que qué estaba haciendo. En vez de decirle ‘me siento un chico’, le dije ‘el sexo que se me otorgó al nacer no coincide con el que yo me siento’. Ella me miró con cara de ‘¿qué me estás contando?’”. Gabriel decidió enviar a su madre todos los enlaces y los vídeos para que entendiera que él era un adolescente transexual, un joven que fue asignado con un sexo femenino al nacer.
Todo empezó a encajar. Marieli entendió qué le pasaba a Gabriel y el motivo por el cual ir al colegio era incómodo. Ahora recuerda: “Siempre era el tema de la gordura, de las gafas, pero él a mí nunca me había dicho que se metían con él por tener más formas o gestos masculinos o porque iba siempre con chandal”. En su entorno, Gabriel vivía algún episodio de transfobia: “ciertas personas me dijeron que hasta que no tuviera pene no me tratarían en masculino”, pero varios compañeros de clase y profesores le apoyaron. La dirección del centro, no. No le facilitaron el uso de los baños o de los vestuarios, no cedieron con el uniforme y tampoco le permitieron que su nombre cambiara en la lista. El último paso: invitarle a abandonar el centro. Y lo hizo. Fue a parar al instituto San Isidro, donde fue el primer transexual en las aulas. Cuando terminó los estudios, eran tres, porque la tolerancia convirtió a ese centro en una referencia para los jóvenes que querían huir de la transfobia de sus compañeros.
Hoy Gabriel sigue avanzando en su proceso de transición, con sus estudios y con su activismo. En ese camino le acompaña su madre; no quieren que la desinformación en la sociedad sea el aval para la intolerancia y el rechazo.
“Hasta 3º de la ESO no supe qué era la diversidad de género”
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Marisol Rojas
Trabaja en la Cadena Ser desde 2007. Empezó madrugando en Hoy por Hoy y ahora trasnocha en Hora 25....