Henry Acosta, el hombre con el que empezó la paz en Colombia

Barcelona

El domingo es un día transcendental en Colombia. Se vota el acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC, una paz a la que se ha llegado tras años de conversaciones cuyos detalles vamos conociendo poco a poco. Hasta hace unos meses, por ejemplo, pocos conocían el nombre de Henry Acosta, una de las piezas claves en todo el proceso. Este economista de 67 años hizo llegar a la guerrilla los primeros mensajes del presidente Santos y participó, desde un segundo plano, en los encuentros de La Habana. Esta mañana en Hoy por hoy con Gemma Nierga, ha explicado los detalles de su labor de 'facilitador', como el mismo se denomina, durante los últimos 6 años.

La relación de Henry Acosta con el proceso de paz comienza mucho antes de cualquier tipo de conversación y negociación. Fue en 1998 cuando fue 'parado" por la guerrilla cuando viajaba en un todoterreno por las montañas. Le llevaron a una hacienda y allí se encontró con el líder guerrillero Pablo Catatumbo. "Hubo empatía, comenzamos a conversar de historia, de política...". A partir de allí comenzó una relación con el lider de las FARC al que siguió visitando para llevarle libros que le pedía.

Fue en 2010 cuando Acosta tomó la iniciativa y escribió una carta al presidente Juan Manuel Santos sugiriéndole la opción de comenzar conversaciones con la guerrilla. Pero ya antes había hecho llegar a Álvaro Uribe un primer mensaje de las FARC que, como los siguientes, empezaba con la frase "Le mandan a decir, dos puntos, abro comillas". Era la forma de Acosta de dejar claro que él no tenía nada que ver con esas palabras "Podían no gustarle y no eran mías". El mismo mensaje se lo hizo a llegar a Santos dos años después, en 2010. Entonces el intercambio de mensajes fue más fluido y, tal y como explica, le llevaba a viajar hasta las montañas donde se ocultaban las FARC para trasmitir las palabras del Gobierno de forma oral aunque también las llevaba en un USB. "Lo llevaba con una clave porque muchas veces iba a buscarlo pero me decían que había dificultades y no me podía atender."

Pero Acosta no era un simple mensajero. También ayudo, con sus opciones, a que ambos bandas acercaran posturas. "La guerrilla me decía '¿Qué opinas? ¿Qué hacemos'. Y yo decía, 'respondan esto' o 'esperen un poquito'. Y al revés, con el presidente Santos, me decía 'Henry, hay este asunto, ¿usted qué opina?'. Yo ayudaba a construir." Como él mismo dice, Henry Acosta fue el facilitador de todo el proceso. "Me decían, 'Henry, hay que facilitar las cosas, presentarlo de forma que faciliten las cosas". El domingo si, como se prevé, gana el "SI" en el plebiscito, se habrá puesto fin a 52 años de conflictos, pero aún queda mucho por hacer como comprobar cómo será la reintegración de los guerrilleros en la sociedad. Pero este es el primer paso, o como dice Acosta, "es una zancada".