Antonio Rebollo: de la zarzuela al rock
El arquero que encendió el pebetero de Barcelona 92 ha rapasado las canciones de su vida
Antonio Rebollo y Diego Manrique en los estudios de la Cadena SER. / A.T.
Madrid
Este miércoles hemos conocido en Hoy por hoy con Gemma Nierga la banda sonora de Antonio Rebollo, arquero paralímpico que encendió el pebetero de Barcelona 1992 en el Estadio de Montjuïc. Ese fue precisamente el gran momento de su vida, porque, ha asegurado, "el mundo del olimpismo cambió con esos Juegos". Y la canción que mejor resume este episodio de su vida es Barcelona, de Freddy Mercury y Montserrat Caballé.
Antonio Rebollo: de la zarzuela al rock
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El recorrido musical de su vida ha comenzado, no obstante, con La Pared, de Bambino, un tema que le recuerda a su infancia, que transcurrió en el barrio madrileño de San Blas, allá por los años 60. Fue en esa etapa de su vida cuando contrajo la polio, de la que le quedaron secuelas que le llevaron por el camino del tiro con arco paralímpico.
De su adolescencia ha destacado La Saeta, de Joan Manuel Serrat. "Era complicado no estar involucrado con la canción protesta por la situación en la que vivíamos", ha confesado Rebollo, que de la música de cantautor vira hacia la zarzuela con El Coro de los barquilleros, de Federico Chueca. El arquero recuerda haber disfrutado de este género en los bajos de la Plaza de Colón.
Rebollo recuerda también Pink Cadillac, de Bruce Springsteen. Este tema se estrenó en 1984, año en el que se celebraron los Juegos Olímpicos y Paralímpicos en Los Ángeles. Fue allí donde consiguió su primera medalla. Aunque es la inolvidable banda sonora de Carros de fuego, de Vangelis, la melodía que resume su carrera en el tiro con arco: "Me recuerda los esfuerzos y sacrificios del deporte".
