Ni una gota en el bote de kétchup
LiquiGlide es un lubricante que, aplicado en las paredes de un envase, consigue que no quede nada de salsa dentro
Este hallazgo pretende eliminar uno de los grandes dramas del mundo desarrollado: acabar con las salsas que se resisten a abandonar el bote. / LiquiGlide
Madrid
Vamos por la vida tirando kétchup como si nos sobrara. El gran reto es conseguir sacar todo, hasta la última gota, del bote. Con el kétchup no se puede hacer como, por ejemplo, con el gel de ducha, que se puede mezclar con agua para sacarle el máximo provecho. Hay quienes quitan la tapa de rosca e intentan rescatar los últimos restos con un cuchillo para minimizar las pérdidas. A cada necesidad, el ser humano procura buscar una solución. Y este drama del ser humano en el mundo desarrollado no iba a ser menos. De eso va este 'lo último no, lo siguiente'.
Un grupo de investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha desarrollado un modo de conseguir que cualquier producto en bote o lata, como el kétchup o la pasta de dientes, caiga por completo de su recipiente. LiquidGlid es un revestimiento en las paredes del envase que hace de lubricante para que el producto en cuestión caiga. También sirve, claro, para el gel de ducha, así que se acabó lo de mezclarlo con agua.
Ese kétchup que cae sin desperdicio podría aderezar la hamburguesa, de la que hablamos hace unos meses, hecha de proteína vegetal. Entonces nos sonaba extraña esta Hamburguesa Imposible, pero ya conocemos a alguien que la ha probado. Es la periodista de El País Rosa Jiménez Cano, que ha compartido su experiencia en Facebook. "Al comerlo puedes percibir que no es carne, pero no sabrías decir exactamente qué es. No sabe a soja, no sabe a judías, no sabe a aguacate... Sabe como a carne, podrías percibir algo extraño, pero no podrías decir que es vegetariano, eso desde luego que no", explica la corresponsal en Silicon Valley. En definitiva, sigue pareciendo un pelín rara la hamburguesa de vegetales.
