Nos indignamos mucho, pero nunca exigimos responsabilidades
"No es normal que dejemos pasar que un ministro como Alfonso Alonso y un portavoz del PP como Javier Maroto hayan sido condenados a soltar 393.000€ por un alquiler más que dudoso cuando eran los mandamases de Vitoria"
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El Ojo Izquierdo: 'Nos indignamos mucho, pero nunca exigimos responsabilidades'
01:27
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Madrid
Cinco años ya del 15-M de la Puerta del Sol. Aquella indignación pespunteó la salida del gobierno socialista de Zapatero y se anticipó a la llegada —mayoría absoluta, recuerden— del PP de Mariano Rajoy. Oculta su influencia durante algún tiempo, las semillas de aquellos días han acabado por germinar de alguna forma en Podemos. No es causa-efecto, como es obvio, pero sería necio negar que muchos —muchísimos, se diría— de aquellos indignados eligen la papeleta de Pablo Iglesias en las elecciones. Y ahora de Unidos Podemos, que atrás quedan aquellas broncas que le montaron los indignados a Cayo Lara, el líder entonces de Izquierda Unida, al que incluso le volcaron una garrafa de agua encima, por corresponsable político de la crisis. ¡Qué tiempos aquellos!
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Y en otro orden de cosas, o quizá en el mismo. No es normal que dejemos pasar como si no ocurriera nada, en ningún país decente se haría que un ministro, por muy en funciones que esté, como Alfonso Alonso, de Sanidad, y un portavoz más que cualificado del PP, Javier Maroto, hayan sido condenados por el Tribunal de Cuentas a soltar 393.000 euros por un alquiler más que dudoso cuando eran los mandamases de Vitoria, y aquí a nadie se le mueva un pelo. Tenemos unas tragaderas gigantescas, ciclópeas.
Nos indignamos mucho, recordábamos el 15-M, pero demasiados se nos van de rositas.