La denuncia de una consumidora en las redes sociales ha vuelto a poner el foco en la comida de los aeropuertos. Azilef Speers, una extranjera afincada en Ibiza desde hace varios años, pidió un «sandwich premium» mientras esperaba la llegada de un vuelo el pasado día 10 de abril en el aeropuerto de Ibiza. Pidió también una cerveza, una bolsa de patatas fritas, un café descafeinado y una caracola de pasas y nueces. Solo el bocadillo «premium» le costó 6,05 euros, aunque en el interior solo encontró una loncha de chóped y unas hojitas de lechuga, según recoge el Diario de Ibiza. «Estafa en el Aeropuerto de Ibiza, 6,05 euros por este pedazo de basura», clama la usuaria en las redes sociales. La damnificada no planteó ningún tipo de reclamación en el local y la empresa de restauración ha iniciado una investigación para esclarecer qué pudo pasar. En verano del año pasado, el aeropuerto de Edmburgo se disculpó ante uno de sus clientes después de que su sandwich de huevo y bacon de 3,20 libras apenas tuviera ninguno de los dos ingredientes.