Sin fechas

Madrid

Lo peor de la reunión tripartita de ayer entre PSOE, Podemos y Ciudadanos es que no se fijó la fecha de la próxima. No está el calendario tan holgado como para que haya que negociar incluso si se celebran reuniones o no. El PSOE afirma que primero tiene que examinar las 20 propuestas presentadas por Podemos y Ciudadanos que ya las ha visto y no las comparte. Pese a todo existen unos pequeños —muy pequeños— avances. Podemos habla de un gobierno de coalición en el que no figura Ciudadanos, pero afirma también que es posible que ese gobierno integre a personalidades independientes, una posibilidad que ya ha barajado el equipo negociador de Pedro Sánchez por su propio lado. 

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Se abre también la posibilidad de negociar algunos apartados económicos, que Ciudadanos haya rechazado ya los nuevos márgenes que propone el grupo de Pablo Iglesias. Tal y como se relacionan esos dos partidos, se diría que Podemos quiere poder decir que las negociaciones a tres fracasan por culpa de Ciudadanos, lo que a su juicio, debería dejar las manos libres a Pedro Sánchez para intentar otro camino. Y que Rivera se aferra al acuerdo con el PSOE mientras intenta zafarse como puede de la maniobra podemita. Dos horas y media, que es lo que duró la reunión de ayer, deberían haber dado para algo más que para leer en voz alta unos pocos folios y para anunciar que se hablarán por teléfono para "dar nuevos pasos". Aunque quizá resulte que dado el ambiente tan poco fluido en que empezaron los contactos, ya es algo que la conversación siga abierta.