Los militantes y votantes del PSOE no aguantan más peleas internas

Madrid

De pocas, muy pocas cosas está seguro este Ojo en estos pantanosos días. Por lo pronto, parece lo más probable que Rajoy se proclame el más don Tancredo de todos los don Tancredo, y permanezca impasible ante el Rey, obligando a Felipe VI –insultante actitud la de esta derecha hacia el Monarca al que tanto dicen respetar, idolatrar y defender-, a tomar la decisión, a la vista del presidente prófugo, de hacer que corran los turnos, como en las pescaderías, y le toque la vez para intentar formar Gobierno al que lleva el 2 en el ticket.

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Puede lograrlo Pedro Sánchez –y las bases ratificarlo o no- pero también puede fracasar. Si se da el primer caso, y ya hablaremos del cómo, el Comité Federal se verá obligado a refrendar lo que hayan acordado los militantes. Pero si no lo logra, nos encaminaremos, o eso parece lo evidente, hacia unas nuevas elecciones. Y a partir de ahí, este Ojo sí se atreve a asegurar que si los dirigentes del PSOE persisten en esta delirante bronca, no se sabe si cainita o suicida, de atizar las mezquinas peleas internas entre barones, duquesas, condes y hasta conde-duques, la militancia, pero también los fieles votantes socialistas van a darles su merecido en las urnas y despacharán a todos ellos al basurero de la historia.

Se lo habrán ganado a pulso.