Los límites de la imaginación
Es una de las grandes firmas de la literatura universal, con cincuenta y cuatro novelas en su haber, y el segundo escritor más traducido de la Historia. Es, además, uno de los autores que más ha inspirado al cine y la cultura popular, por lo que, hayamos leído o no sus novelas, todos sabemos quién es Verne y asociamos su nombre con viajes extraordinarios e iconos muy reconocibles como el globo o el Nautilus.
Imágen de Julio Verne / Fundación Telefónica
Julio Verne está en el origen de la curiosidad, la aventura, el descubrimiento y el conocimiento de muchos lectores que, al llegar a la edad adulta, han acometido lo que el autor imaginó. Sus novelas, perfectamente documentadas, cartografiaron el mundo conocido y abrieron las puertas de otros mundos fantásticos o intuidos. El objetivo de los Viajes Extraordinarios, una serie de novelas ideada por su afamado editor, Hetzel, era introducir en el género de aventuras todo el saber contemporáneo, para poder divulgar conocimientos actualizados de manera amena y entretenida. En esto, Hetzel y Verne fueron unos pioneros.
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Así, Verne se hizo eco del espíritu de su tiempo y, gracias a su profundo interés por la geografía, la ciencia y los avances de la técnica y los transportes, pudo aventurar algunas cosas que estaban a punto de acontecer, como los vuelos con aparatos más pesados que el aire o la navegación submarina, y otras más inciertas en su tiempo como la posibilidad de viajar a la Luna. Las fronteras entre ficción y realidad son a veces invisibles -no siempre necesarias- y los impulsos creativos que hacen avanzar la civilización proceden tanto de la ciencia como de la cultura.
La exposiciónque se presenta hasta el 28 de febrero en Fundación Telefónica pretende recoger todos aquellos ingredientes que maravillaron y siguen maravillando a los lectores de Verne y, al mismo tiempo, reflejar su particular contexto: una época de vertiginosos cambios y extraordinaria fe en el futuro. Presenta además un catálogo de personajes relacionados con Verne que demuestran hasta qué punto su obra fue significativa en ámbitos muy dispares. El visitante, convertido en explorador, puede recorrer las obras de Verne más representativas y los distintos ámbitos en que transcurren: la tierra, el aire, el hielo, el agua, el espacio y el tiempo, de la mano de contemporáneos españoles y extranjeros: aristócratas como Luis Salvador de Habsburgo, aventureros como Manuel Iradier o Julio Cervera, cineastas como Segundo de Chomón, Jean Painlevé u Orson Welles, periodistas intrépidas como Nellie Bly, la primera mujer en dar la vuelta al mundo en 72 días, tramposos como Richard E. Locke, fotógrafos como Nadar, pioneros del submarinismo como Louis-Auguste Boutan o de la aviación como Santos-Dumont, directores de escena, escritores, astrónomos, militares, aeronautas, aviadores, ingenieros, compositores de ópera y zarzuela… Cerca de treinta personajes que configuran una crónica coral del espíritu verniano en la exposición Julio Verne: los límites de la imaginación.
María Santoyo, comisaria junto con Miguel A. Delgado de la exposición.
