El joven español que se codea con los líderes mundiales en Davos

Barcelona

Tiene solo 31 años pero en su curriculum ya puede presumir de haber lanzado en Silicon Valley, Emerge, una start-up que dará mucho que hablar en el futuro y de ser uno de los innovadores menores de 35 años más prometedores para el 'MIT Technology Review'. Y a partir de ahora podrá añadir también su participación en uno de los encuentros más exclusivos de los líderes políticos y económicos: el Foro Económico Mundial que se celebra anualmente en Davos, Suiza. Esta mañana en Hoy por hoy con Gemma Nierga, Isaac Castro nos ha explicado cómo es por dentro el Foro de Davos y hemos descubierto el impresionante trabajo que le ha llevado a codearse con los grandes líderes mundiales.

Un grupo de jóvenes inquietos y comprometidos entre decenas de jefes de Estado, presidentes de bancos y CEOs de grandes empresas. Daría casi para argumento de película pero eso son los "Global Shapers" que participan estos días en el Foro Económico Mundial. Y entre ellos hay un español: "Somos la representación de la juventud aquí en Davos" explica Isaac Castro, un joven ingeniero, nacido en Móstoles pero residente en Silicon Valley, esa especie de meta que todo emprendedor se marca.

Pero Isaac no está en la pequeña localidad Suiza para observar, también está para tomar la palabra. Lo hará mañana en dos conferencias. La primera girará en torno al proceso de paz en Colombia, que conoce a la perfección ya que ha residido en Bogotá durante tres años antes de marchar a EE.UU. "Fuimos a la montaña a vivir una semana con diez desmovilizados de las FARC y 20 niños que habían sufrido la violencia relacionada con el conflicto" cuenta este joven con la naturalidad del que hace las cosas por convencimiento y no por impostura. Y es que esa es una de las características de los ‘shapers’: "compromiso para impactar positivamente en las ciudades en las que viven". Isaac adquirió su compromiso tratando de demostrar a la sociedad colombiana que la representación es posible.

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Y compromiso, mucho, se necesita para convencer a la gente de que Davos no es solo un club de ricos alejados de los problema de la sociedad. Isaac cree que, en ese sentido, se ha mejorado: "Davos lleva muchos años haciendo el esfuerzo para que la sociedad esté mejor representada aquí". Los argumenta con el mejor ejemplo, el suyo propio. "Acabo de hablar con el presidente de Iberdrola y ese mismo hecho, que yo le haya podido dar mi opinión, es lo que hace grande este evento".

Precisamente, el encuentro, más o menos casual con directivos y gente influente es la clave de Davos. Y más para un emprendedor que aún necesita de apoyos para sacar adelante su idea empresarial, nada menos que digitalizar el sentido del tacto, es decir, que se pueda, por ejemplo, transmitir el sentido del tacto de los dedos en la parte de atrás del teléfono. "La magia de datos es el networking, estar en los pasillos y poderte encontrar con cualquier persona, con tus lideres más admirados. Aquí puedes conseguir el contacto que necesites." De momento Isaac lleva al Foro Económico Mundial su experiencia, sus ideas y la voluntad de que las cosas se hagan un poco mejor. Que no es poco.

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