De una actividad "absolutamente normal" a la dimisión de Gustavo de Arístegui
Las reacciones desde que el pasado 9 de diciembre la Cadena SER destapara que el ya exembajador en la India facturó a empresas españolas por gestiones para obtener contratos de obra pública en el exterior
Soraya Sáenz de Santamaría fue la última del Gobierno en hablar sobre De Arístegui, aunque apenas entró en el tema. / Angel Díaz (EFE)
Madrid
El pasado 9 de diciembre la Cadena SER destapaba que el despacho Karistia, vinculado al ya exembajador de España en la India, Gustavo de Arístegui, había facturado a empresas españolas por gestiones para conseguir contratos en el exterior. La misma información afectaba al despacho Scardoi, de Pedro Gómez de la Serna, diputado del PP y número dos para el Congreso por Segovia en las elecciones del 20 de diciembre. Ambos reconocían los contratos y confirmaban sus gestiones para que Elecnor obtuviera adjudicaciones en Argelia. Los dirigentes del PP coincidían en que su actividad, entre 2010 y 2014 y bajo la marca Voltar Lassen, estuvo autorizada por el Congreso de los Diputados y que todos sus ingresos están declarados y tributados ante Hacienda.
Ese mismo día, 9 de diciembre, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguraba que veía "absolutamente normal" la actividad de ambos miembros del Partido Popular y dabas por buenas sus explicaciones. El PSOE, mientras tanto, pedía la destitución de De Arístegui y la renuncia de Gómez de la Serna. Poco después, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, informaba de que la Oficina de Conflictos de Intereses investigaba ya las supuestas comisiones cobradas por el entonces embajador en la India.
A última hora del jueves, 10 de diciembre, el Partido Popular abría expediente a De Arístegui y Gómez de la Serna. El objetivo era investigar la actividad de ambos. El viernes 11 de diciembre el Gobierno hablaba por última vez de Gustavo de Arístegui. Fue la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, aunque eludió pronunciarse, apenas entró. "Quiero informarles de que el mismo día 9 de diciembre se requirió al embajador español en la India que diera explicaciones. Esta manera inmediata de actuar es posible gracias a cambios legislativos de esta legislatura", dijo Sáenz de Santamaría. Este domingo, Gustavo de Arístegui dimite, dice, para no perjudicar al Gobierno de Rajoy.
