De la ruptura al ajuste, pasando por el OXI
El pasado 26 de julio Grecia se levantaba de la mesa de negociación con los acreedores. Referéndum mediante, ahora ha vuelto con un programa de recortes
Madrid
Viernes 26 de junio. Después de una intensa semana de negociaciones entre Grecia, acreedores y el resto de líderes Europeos, Alexis Tsipras convocaba una reunión urgente de su Gobierno para analizar la última propuesta. Y al final de la reunión, convocaba el referéndum del 5 de julio: "Estas propuestas que violan claramente las reglas europeas básicas y los derechos fundamentales muestran que el propósito de algunos socios no es un acuerdo viable para todas las partes, sino, posiblemente, la humillación de todo un pueblo", anunciaba el primer ministro griego.
El 28 de junio, dos novedades importantes. Por un lado, Tsipras comunica el cierre de los bancos durante seis días y un límite de 60 euros para sacar de los cajeros. Es el corralito. Por otro lado, el Banco Central Europeo decide mantener los préstamos de emergencia a los bancos griegos.
El 30 de junio, martes, se cumplía el plazo para que Grecia pagara 1.600 millones de euros al Fondo Monetario Internacional. El Ejecutivo heleno no paga, el mismo día en que concluye el tramo del rescate y el Eurogrupo se niega a prorrogarlo por unos días, hasta la llegada del referéndum. Al día siguiente, Tsipras pide el NO para la consulta que se va a celebrar el día 5.
3 de julio. Viernes. A falta de dos días para el referéndum, los griegos salen a la calle, tanto los partidarios del sí como los del no. Domingo, el día D. O día R, de referéndum. Gana el NO, el OXI que había recorrido dos días antes la plaza Syntagma de Atenas, con un 60 por ciento de los votos. Al día siguiente, los bancos siguen sin abrir. Una de las sorpresas de la jornada: la dimisión de Yanis Varoufakis, el ministro de finanzas, el rostro más duro en la negociación con la antigua troika.
7 de julio. Los líderes de la Eurozona exigen a Grecia que presente sus propuestas antes del jueves para desbloquear la negociación sobre un tercer rescate. El 8 de julio, Grecia pide formalmente un tercer rescate. También ese día, Tsipras comparece en el Parlamento Europeo. Y en la noche del 9 al 10 de julio, el primer ministro griego cumple con el plazo y presenta a los acreedores su programa de recortes. Incluye eforma de las pensiones, subida del IVA o la privatización de los principales puertos del país. Unas propuestas a las que el parlamento griego daba luz verde en la madrugada de este sábado.