Tomar buena nota

Madrid

Guillermo Zapata comunicó ayer a la alcaldesa de Madrid que renunciaba a hacerse cargo de la concejalía de Cultura y Deportes, por estimar que la polémica desatada en torno a sus tuits perjudicaría seriamente su trabajo. El señor Zapata reiteró sus excusas a las víctimas de la violencia, mostró su respeto por ellas y dejó claro su rechazo a cualquier forma de agresión. Ojalá en el futuro inmediato todas las formaciones políticas actúen con la misma rapidez y sensatez y en especial las formaciones, y los medios, que han señalado al señor Zapata con su vocabulario más grueso. Es de suponer que todas ellas han tomado buena nota de lo que hay que hacer en esos casos y que ya no tendremos que sufrir nunca con la negativa a presentar una dimisión ante el requerimiento de otra fuerzas políticas y de un sector amplio de la opinión pública.

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El caso del señor Zapata va a constituir un ejemplo y a abrir un nuevo tiempo, en el que los concejales, consejeros de comunidades, ministros y dirigentes de partidos demuestren su disposición a no perjudicar la confianza depositada por los ciudadanos. Un tiempo en el que todo el mundo va actuar con inteligencia y sensibilidad, como la nueva alcaldesa de Madrid. ¿O no? ¿O no va a ser así? ¿O no van a actuar todos los alcaldes, concejales y cargos del PP, de PSOE, de Ciudadanos, llegado el caso, igual que los concejales de Carmena? Líbrenos el demonio de pensar mal.