Fantasmas del pasado
Reflexión sobre las voces en el seno del PP que piden una renovación interna
Madrid
El círculo vicioso, el silogismo diabólico al que ayer me refería al hablar del PP, lo acaba de reventar una especie de motín a bordo. El motín se presenta en varios planos: el de los barones que anuncian que se van, Luisa Fernanda Rudi, Alberto Fabra, José Ramón Bauzá, tal vez, Cospedal; el que se atrevió a cuestionar directamente al presidente, Juan Vicente Herrara; o el peor de todos, el del sordo rumor que agita las bases y que anda ya poniendo nombres a la renovación (el nombre de Nuñez Feijóo, por ejemplo).
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Iñaki Gabilondo, en la Cadena SER / JAVIER JIMÉNEZ BAS
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Iñaki Gabilondo, en la Cadena SER / JAVIER JIMÉNEZ BAS
Y no solo es el resultado de las elecciones pasadas, es el temor a las elecciones futuras porque la revuelta no parte solo de lo ocurrido el domingo, sino del inmovilismo puesto en evidencia en el Comité Ejecutivo de ayer con un Rajoy impertérrito en medio del naufragio.
El nerviosismo del PP recordará a algunos la situación tras la derrota electoral del 2008, cuando Esperanza Aguirre, jaleada por Pedro J. Ramírez y Federico Jiménez Losantos, quiso mover la alfombra a Rajoy, situación que salvó en el congreso de valencia. Pero trae un fantasma del pasado aún peor, el movimiento de tierras que a finales de los 80 anunció el comienzo de la decadencia de la UCD.