¿Dónde está el dinero?
Esta repentina voluntad de PP y PSOE de cambiar el sistema electoral para mejorar nuestra calidad democrática la pueden aplicar ya para explicar el presente
Madrid
Parece que de la amplia batería de medidas que ayer anunció Susana Díaz en materia de corrupción y calidad democrática el único punto bien recibido en las filas del PP es aquel que se refiere a instaurar la segunda vuelta para elegir alcaldes y presidente autonómicos. Incluso hay disputa ahora para saber a quién se le ocurrió la idea primero, si al PSOE o al PP.
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Es un cambio de fondo en nuestro sistema electoral que consistiría en hacer en dos partes las elecciones, de manera que a la segunda vuelta solo concurrirían las dos listas más votadas. A la vista de la competencia que le ha salido a los grandes partidos, podemos ver esta propuesta como un intento de garantizar la gobernabilidad de las instituciones, si somos buenos. O como un intento de los partidos clásicos de protegerse frente a los nuevos partidos, si somos malos.
Está bien que piensen en el futuro. Pero de momento esta repentina voluntad de mejorar nuestra calidad democrática la pueden aplicar ya para explicar el presente. Por ejemplo, urge un pleno en el Congreso para saber por qué, según el Banco de España, sólo vamos a recuperar el 50 por ciento del dinero con el que rescatamos a los bancos. Hoy sabemos que fueron un total de 76.000 millones de euros que se llevaron prácticamente entre 6 entidades, y por este orden: Bankia, Catalunya Caixa, Novagalicia Banco, Banco de Valencia, Caja de Ahorros del Mediterráneo y Banco Gallego. Siempre nos dijo el Gobierno que era un préstamo y que se devolvería todo en las mejores condiciones. Antes de que acabe la legislatura hay tiempo de sobra para que el presidente del Gobierno suba a la tribuna de la Cámara y nos aclare por qué ya no será así.