Una premonición y dos tabúes circulando por la red
Un viral relacionado con el accidente de Germanwings, una fotografía que habla del tabú que existe en torno a la menstruación y una cámara oculta que habla de la islamofobia han sido los virales de esta semana
Una premonición y dos tabues circulando por la red
09:05
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Madrid
Durante la pasada semana, el accidente de avión de germanwings copó una gran parte de la actualidad. Las opiniones y debates en torno al asunto han sido protagonistas también en las redes sociales. Y ha habido una historia que a pesar de no tratar este tema concretamente, si guarda una estrecha relación con este terrible suceso que le costó la vida a 150 personas.
El inicio de este viral se remonta al año 2011, cuando Pablo Motos, en El Hormiguero, contó la historia de Ric Elías, un joven que volvió a nacer y decidió compartirlo en una charla.
Él viajaba en un avión cuando los dos motores del mismo cayeron al vacío. Gracias a una maniobra extraordinaria del piloto, finalmente se evitó la colisión con un aterrizaje de emergencia en el río Hudson y casi todos los pasajeros consiguieron salvar su vida. Fue en este momento, en el que Ric se dio cuenta de que su vida ya no sería igual.
Este vídeo, protagonizado por el famoso presentador, llevaba años guardado en el móvil de Manuel, un gaditano al que le impresionó la historia y decidió reservarla para verlo en los momentos más difíciles de su vida. Lo sorprendente ha sido que decidiese publicar el vídeo de Ric, unos días antes de la colisión del avión de Germanwings en los Alpes, y este ha sido el motivo de la viralización.
Según ha contado Manuel a Verne de El País, publicó el vídeo porque estaba harto de ver tonterías colgadas en facebook. Unas horas después tenía más de mil peticiones de amistad de personas a las que no conocía. Y a partir de ahí las visitas no hicieron más que crecer. Solo desde su muro ha sido compartido más de 130.000 veces y las visitas superan los 5 millones.
Una historia con moraleja, que sin quererlo se ha convertido en una de las más vistas y comentadas que nos hace reflexionar, que nos muestra que ver la muerte de cerca, da otra visión de la vida.
Rapi Kaur ha hecho de una fotografía, una polémica que en los últimos días ha sido especialmente comentada y que ha puesto en duda muchos de los valores con los que convivimos no solo en la sociedad, sino también en las redes sociales.
Esta poetisa canadiense decidió colgar una foto suya, en Instagram, en la que aparecía durmiendo con una mancha de sangre en su pantalón. Se trata de una parte de su proyecto de final de curso sobre la retórica visual, con el que pretende desmitificar la menstruación. La controversia nace en el momento en el que esta red social decidió eliminar la imagen alegando que no cumple con las normas de la comunidad.
A partir de esto Rapi Kaur respondió en su muro de Facebook con las siguientes palabras:
"Gracias Instagram por darme la respuesta que motivó mi trabajo. No me disculparé para no alimentar el ego y el orgullo de una sociedad misógina que prefiere ver mi cuerpo desnudo pero no acepta una pequeña mancha. Sobre todo porque vuestras páginas están llenas de imágenes de mujeres, muchas de ellas menores, cosificadas, sexualizadas con intenciones pornográficas y tratadas como algo menos que seres humanos".
Con este suceso nos preguntamos si una vez más las redes sociales son un bien, o un mal, ya que muchas veces alimentan prejuicios y tabués que a estas alturas, deberían de estar superados en nuestra sociedad.
Y del tabú de la naturaleza de la mujer, al que existe en torno a la figura de la religión musulmana, y más en los últimos meses en los que los ataques terrorristas del estado islámico están estigmatizando quienes la practican.
Blind Muslim Trust Project es una campaña que intenta acabar con los prejuicios de los musulmanes. Ya ha pasado en Canadá, Estados Unidos y esta vez, en Estocolmo. Se trata de una cámara oculta en la que, en mitad de una de las avenidas más transitadas de la ciudad, se posiciona un ciudadano musulmán con los ojos vendados y un cartel que reza: "Soy musulmán, me etiquetan de terrorista. Yo confío en tí, ¿confías tú en mí? Dame un abrazo".
El resultado es que un gran número de personas se acercan a este hombre y le otorgan este abrazo, que el pedía, cofiando en él. El principal objetivo que busca esta iniciativa es acabar con la islamofobia, hacer ver que el islam y el terrorismo, no van de la mano.
Un vídeo premonitorio y un par de tabúes han hecho que esta semana las redes sociales un auténtico bullicio de comentarios, de respeto y también por desgracia, de faltas del mismo.
