La tentación política de esconderse tras una palabra

Madrid

A los imputados ya no se les va a llamar imputados. A partir de ahora son investigados. Así lo recoge el proyecto de ley de Enjuiciamiento Criminal que ha aprobado hoy el Consejo de Ministros. Es uno de los puntos de este proyecto, que también fija plazos para la instrucción de los casos, entre otras cosas. Pero nos vamos a detener en el cambio de denominación de lo que hasta ahora conocíamos como imputados. Ya hemos explicado hasta la saciedad que estar imputado no es estar ni acusado, ni condenado. Pero el término imputado se ha usado por las fuerzas políticas salpicadas por casos de corrupción para lanzarse las miserias a la cara, o para lanzarse los imputados de enfrente porque los propios son los propios.

Ahora se van a llamar investigados, un cambio semántico, que se ajusta a la realidad, eso es lo que son, pero que no debería servir para que las fuerzas políticas relajaran, todavía más, su asunción de responsabilidades en casos de corrupción.