Regate en corto de Mas

Madrid

Habrá elecciones en Cataluña el 27 de septiembre. Al intenso calendario electoral de este año, sumen una más. Artur Mas regatea de nuevo en corto, rehabilita la imagen de unidad de los soberanistas rota en los últimos meses, y consigue no ser el primero en someterse a unas elecciones con la crecimiento de Podemos y Ciudadanos amenazando el eterno discurso nacionalista.

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Su habilidad táctica queda de nuevo demostrada. Pero como está en el Parlamento en manos de Esquerra y en la calle, en manos de las entidades civiles independentistas...ha tenido que ceder: Primero en imagen de autoridad: la convocatoria electoral es prerrogativa exclusiva del President y él lo hace absolutamente presionado, y tras una larguísima reunión a tres bandas. Y además no tendrá la lista única que pretendía. No la habrá porque Esquerra se niega en redondo a compartir sus posibilidades de crecimiento con una CiU en decadencia, rota por dentro, con la sede embargada y la bomba Pujol soltando metralla cada poco.

Pero más allá de la calculadora de los intereses electorales de unos y otros... ¿alguien están pensando en los catalanes en este momento?, ¿en todos los catalanes? Han tenido tres elecciones autonómicas en cinco años, cuando acabe el 2015 habrán acudido tres veces a votar. Llevan años sufriendo los recortes que CiU ha aplicado con mano de hierro. A los que aspiran a la independencia primero les dijeron que esto estaba chupado, después tropezaron con la ley, y al final vieron cómo sus líderes se ponían a discutir sobre quien lo rentabilizaba mejor. A los que se quieren quedar en España, el gobierno les dice que no hay más letra que la de la ley actual y nada de una alternativa integradora y modernizadora.

Y todos, también el resto de los españoles, nos disponemos a invertir 8 largos meses en otra agotadora pre-campaña electoral. Ni el Santo Job tenía tanta paciencia.