Insistamos, hay que luchar contra la violencia machista

Madrid

Esta tarde, en la redacción, he empezado a escribir esta portada una y otra vez... me preguntaba qué podía decir que no se haya dicho ya, qué podía añadir yo cuando cada mes, casi cada semana, nos hemos sobrecogido con un asesinato machista.

En un momento de la tarde, después de haber escrito y borrado un buen número de líneas, he llegado a la conclusión de que hay ocasiones en las que no es necesaria la originalidad sino la insistencia. Hay realidades ante las que una de las mejores aportaciones que se puede hacer pasa por el compromiso de la palabra, por decir lo obvio pero decirlo alto, por recordar lo que todo el mundo sabe pero no desaprovechar la ocasión de recordarlo... Y aquí estamos, la gente que nos dedicamos a esto de contar cosas tenemos el privilegio de disponer de los altavoces que dan eco a las palabras... tenemos las ocasiones de recordar que la violencia machista no debe ser interpretada como un mal propio de la genética social, tenemos la ocasión y la obligación de insistir en que este tipo de violencia puede y debe combatirse, tenemos la ocasión y la responsabilidad de combatir la resignación, las falsas justificaciones, las explicaciones inciertas, la desidia o la torpeza de quienes disponen de los instrumentos para reforzar la lucha.

Las últimas víctimas tenían 37 y 38 años, eran jóvenes, eran madres, tenían una vida que merecían vivir, tenían una vida que les pertenecía,... a ellas, solo a ellas, y no a un hombre, a ningún hombre, nunca, jamás. Lo decimos hoy, lo diremos con cada muerte. Si tenemos la voz, no podemos callar.