Escoltas tras el fin de ETA
En Hora 25 nos interesamos por la situación en la que quedaron miles de escoltas después de que ETA decidiera dejar de matar
Era el 20 de octubre de hace tres años. Cese definitivo de la violencia de ETA. Por fin se podía empezar a respirar. A convivir. A ser libre. A estar en paz. Durante veinte años ETA mató a cientos de personas. Políticos, empresarios, policías, amas de casa, catedráticos, militares, guardia civiles, estudiantes... Y escoltas. También escoltas.
Los que permitieron, -durante todo ese tiempo-, que se pudiera seguir haciendo política. Que se llegara, precisamente, a alcanzar la paz. Se dedicaban a ser la sombra. A no perder de vista a su escoltado ni un solo momento. A provocar momentos de calma cuando todo era tensión. Y también, SÍ, su misión era evitar la muerte.
Trabajadores, en general, bien remunerados. Pero, ¿cómo se paga el proteger de la muerte? ¿cómo, el provocar la normalidad en tiempos del terror?
Hoy, tras el cese de la violencia en el País Vasco ¿en qué situación están estos profesionales? Sólo unos pocos han conseguido mantener su puesto de trabajo. La inmensa mayoría de ellos, está en paro. Algunos -los menos- han conseguido reciclarse.
Queremos hablar hoy de quienes nos cuidaron, de quienes durante tanto tiempo se preocuparon de que se pudiera salir a la calle simulando normalidad. de cuál es su presente, de cuál, el futuro de los escoltas.
Sara Vítores
Coordinadora magazine Hoy por Hoy