El Madrid viaja a Múnich confiado en su fútbol
Ronaldo recupera su mejor versión ante Osasuna con dos avisos para Guardiola
El Madrid saboreó la victoria en los entrantes antes de pasar al plato principal de la cata. De camino a tierras alemanas, el equipo de Ancelotti superó la tensión de la eliminatoria europea con buen juego y gusto para el paladar del Bernabéu, que asistió a dos momentos señalados: la visita de la Copa del Rey y el homenaje a Tito Vilanova | El directo del partido.
Más información
El destino quiso que el ofrecimiento del título obtenido frente a los culés dejase paso al solemne homenaje a uno de los creadores del mejor Barça de la historia, pesadilla de todo madridista. Espacio para el silencio, para el reconocimiento. Los años de dominio azulgrana, incluso en territorio blanco, ideados por la pareja Guardiola-Vilanova, no dejan de ser parte de un deporte que idolatra a sus elegidos y Tito lo es. En Barcelona y en Madrid. El Bernabéu supo despedirle.
El aplauso unánime dejó paso al espectáculo y el Madrid, contagiado por los brazaletes negros, rindió honores con una buena dosis de fútbol. Fórmula que Vilanova siempre quiso preservar. El equipo merengue se sobrepuso a las necesarias rotaciones de Ancelotti -Xabi Alonso, Pepe, Bale, Coentrao y Benzema- para dominar el partido desde el primer minuto. La única duda residía en el lateral zurdo con la entrada de Marcelo, 'en pruebas' de cara al Bayern, o como descanso para Coentrao, artífice de un genial partido contra los teutones.
El conjunto local no perdió un instante en divagaciones y recibió el premio por adelantado. Con solo seis minutos de juego, Ronaldo bajó un envío en largo a sus dominios y lo convirtió en su característico latigazo. Disparo indescifrable, sumido en el efecto, que se elevó por encima de la portería y cayó perfecto. De arriba abajo, de dentro a fuera. Directo al ángulo largo de la portería defendida por Andrés Fernández. Gran gol del portugués después de un partido de tanteo por la lesión donde no midió las carreras pero sí se le vio a medias.
Osasuna no había hecho nada mal, cosa que tampoco es necesario para recibir un tanto de este calibre si el balón cae en las botas del jugador indicado. El bloque de Javi Gracia no se amilanó -lo peor que puedes hacer en el feudo blanco- y Oriol Riera, Armenteros y Cejudo se atrevieron con el empate. Ninguno lo logró, con disparos desviados y la presencia de Diego López. Para entonces, los navarros no eran conscientes de que todo su partido se había acabado. Y no porque el Madrid sellara el encuentro con goles.
Se desplegó un bloque muy dinámico, combinativo, pero sobre todo dominador en la primera parte. A diferencia de otras ocasiones donde los goles caen antes que el juego, esta vez, el gol tuvo que esperar distraído con el fútbol. Ronaldo y Ramos se asociaron en varias ocasiones, con papeles intercambiados, pero el andaluz fue incapaz de pronunciarse en la portería.
Antes del descanso hubo tiempo para que Ronaldo siguiese afinando puntería para el Allianz Arena con un libre directo de potencia endiablada que se marchó rozando el palo. El gol se escurría porque Andrés Fernández lo evitaba ante la insistencia de Modric, Nacho y Morata. Disparos que dejaban paso a paradas y el silbato como punto y seguido. El segundo tanto tendría que esperar a la reanudación.
El Madrid embotelló a Osasuna casi sin esfuerzo, por decreto. La diferencia en esta segunda parte fue la efectividad. Tras un intercambio entre Armenteros y Modric, fue Cristiano quien se volvió a mostrar rotundo, colosal. En una situación parecida a la del primer obús, el portugués condujo bordeando la frontal y dinamitó el partido. El esférico se escapó de todo rumbo probable para alojarse en un rincón que pocas veces visita. Difícil recordar un tanto que haya entrado tan ajustado por la escuadra.
Con el público rendido a su ídolo, Ancelotti decidió reservarle de esta fiesta para la verdadera batalla. En su lugar entró Casemiro pero en el Madrid no cambió nada. El equipo siguió funcionando a la perfección, siempre desde la dirección de Isco y el desborde de Di María. El argentino, antes del 60, sirvió un centro perfecto para que Ramos encontrase la ocasión que llevaba buscando todo el partido.
La conversión cabeceadora del central dio rienda suelta a la imaginación de Carvajal. El jugador, que había entrado ocupando la demarcación de interior diestro, simuló el tanto de Ramos con otro testarazo, esta vez de vaselina, tras un servicio perfecto de Isco. Antes del final, Morata mereció llevarse su premio personal ante tanta insistencia pero el linier anuló su esfuerzo por fuera de juego.
Tiempo para olvidarse de prolegómenos, de instantes suspendidos de la temporada. El curso del Madrid se decide muy lejos del Bernabéu, en Múnich, y contra el copropietario -Pep- del futbol imaginado por Tito. La mejor noticia para los blancos es que cuenta con Ronaldo, otro de esos exponentes del fútbol moderno.
'El Larguero' | 'Carrusel' | 'SER Deportivos' | 'Hora 25 Deportes' | 'Play Fútbol' | 'Play Basket' | 'Punto, SER y partido' | Fórmula 1 | Seis Naciones | Más deportes
NaN:NaN:NaN
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/20140426csrcsrftb_3.Aes/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Gol de Cristiano Ronaldo (Real Madrid 2 - Osasuna 0)
02:44
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/20140426csrcsrftb_4.Aes/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Gol de Ramos (Real Madrid 3 - Osasuna 0)
01:15
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/20140426csrcsrftb_5.Aes/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Gol de Carvajal (Real Madrid 4 - Osasuna 0)
00:59
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/20140426csrcsrftb_6.Aes/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>