El editorial de Pepa Bueno: "De la vanguardia europea a la retaguardia"

La Ley Gallardón del aborto llega hoy al Parlamento Europeo. Se hablará de ella en el pleno de la cámara pero los principales grupos parlamentarios, menos el PP, ya han anticipado sus críticas a la Ley. Los progresistas y liberales europeos hablan de retroceso histórico en España, de que el texto criminaliza la libertad de las mujeres, fomenta la desigualdad, y apuntan directamente a que el Gobierno crea un nuevo problema en un país que ya tiene muchos. Y para aclarar de qué problemas hablan los eurodiputados escuchen a la presidenta de la Asociación Española de Neuropsiquiatría. Dice que la Ley Gallardón dejará marcadas para siempre a las mujeres que aborten, y en situación de inseguridad jurídica a los profesionales que intervengan. Eudoxia Gay, presidenta de la Asociacion de Profesionales de la Neurosiquiatria, señala "las mujeres que abortan no son enfermas mentales, seguro que están pasando por un momento estresante".

Argumentos como estos manejan los eurodiputados que hoy criticarán la Ley Gallardón en Eurocámara. Las que hoy escucharemos allí, serán críticas sin efectos prácticos, pero que añaden deterioro de imagen y presión exterior a un asunto en el que el Gobierno ya tiene bastante presión interna. Lo último, ya saben, que el presidente extremeño, el popular Jose Antonio Monago, ha pasado de los discursos a la acción parlamentaria contra una ley de su propio partido. Monago votó en contra de un propuesta socialista que pedía la retirada de la Ley Gallardón, pero registró otra que viene a pedir más o menos lo mismo.