“El zambombazo sorprendió al vecindario cuando habían regresado para ventilar y recoger cosas. Una pregunta. ¿Por qué se levantó ese cerco?"
Mirando a la explosión de gas en Noain
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Pamplona
Parece un escenario de guerra. Es lo que nos dijo ayer el alcalde de Noain, Sebastián Marco, minutos después de la fuerte explosión que sacudió la calle Concejo de Zabalegi. Fachadas, coches destrozados, fuego. Eso poco antes de las 7 de la tarde.
250 personas siguen en hoteles y 6 ingresadas todavía en el Universitario. Los más graves una chica de 13 años y otro de 25, en la UCI pero sin que se tema por su vida. Sobre las 3 de la tarde un escape de gas llevó a una primera evacuación de esa zona. 3 horas más tarde, el zambombazo sorprendió al vecindario cuando habían regresado para ventilar y recoger cosas. Una pregunta. ¿Por qué se levantó ese cerco?
Apunta la consejera a la empresa suministradora del gas. La investigación continúa y lo único que está claro, según la Guardia civil, es que no hubo ningún tipo de artefacto de por medio.
Cuando aún trabajaban los bomberos en Noain, la primera hora de la mañana nos ha dejado otro incendio. Y muy simbólico. Como una taza humeante el cilindro del planetario de Pamplona, un nuevo fuego destruye el corazón del recinto. Javier Armentia, ex director del planetario, lo describe de forma clara.
La parte buena, no hay daños físicos. Pero el impacto, el simbólico, en la vida cultural y científica tardará mucho en repararse.
La entrada de Lorente