"A lo de fascistas añadieron el dibujo de un pene en la cara de Javi García y Feijóo, presidentes del PP en Navarra y España. Todo muy revolucionario, se ve"

Pamplona

Crimen y castigo. Es una de las novelas más conocidas del ruso Fiodor Dostoyevsky. Tiene seiscientas y pico páginas así que hace falta tener tiempo y ganas para leerla. La novela de hoy es más corta, pero recoge las brasas de lo que os contamos ayer sobre los indicios de que el ambiente exaltado en la política se estaba contagiando a la sociedad. Así lo piensa al menos el decano del colegio de sociología.

Uno de los "crímenes" de los que os hablamos ayer son las pintadas que aparecieron en la sede del PP. Fascistas, ponía. Interior ve una relación evidente entre estas pintadas y otras acciones vandálicas que se produjeron esa noche y las atribuye a miembros de Kontseilu Sozialista, una escisión de la izquierda abertzale que considera que EH Bildu se ha vuelto un partido burgués. A lo de fascistas añadieron el dibujo de un pene en la de cara Javi García y Feijóo, presidentes del PP en Navarra y España. Todo muy revolucionario, se ve.

Sede del PP a 400 metros de la plaza merindades donde arrestaron a dos hombres mientras echaban colorante rojo a la fuente. Forcejearon con los agentes y por tanto fueron denunciados también por resistencia.

Y ayer también os contamos lo que un grupo de estudiantes de la UN decidieron escribir en el libro de visitas del Parlamento. Chivite zorra, etarra. Ojo, y parlamentarios masones, que no sé quiénes les habrá contado a chavales de 20 años qué son los masones y que recuerda mucho a aquello de la conspiración de la que hablaba el general de voz aflautada que dictó sobre España durante 40 años. ¿Castigo? Pues habrá que ver en qué se queda ese castigo.

Es lo que nos ha dicho la directora del aula de derecho parlamentario. Universidad que trasladó sus disculpas a la presidenta y que apunta que 5 de ellos han reconocido haber participado en la hazaña. El castigo, pues ya veremos.