"El aumento de precio de los vehículos lleva a las empresas a alargar la vida de los camiones"

Cadena SER

Tres decenios en la carretera lleva la empresa de transportes Hermanos Munarriz Ollacarizqueta. Raimundo Munarriz cuenta en La Ventana de la Empresa navarra cómo se aliaron su padre y su tío a principios de los años 90 con sendos camiones, para ir aumentando la flota poco a poco hasta llegar a una docena de vehículos en 2015, cuando se retiraron de la primera linea. Pasaron entonces las riendas del negocio a Raimundo, que se encarga sobre todo de la organización logística, de las rutas y el personal, y a su hermano Marcos, responsable de los aspectos financieros y las cuentas de la empresa. Eso sí, ambos llevan en la genética el gusto por el volante y el asfalto. "Hemos conducido camión; en cuanto cumplimos la edad legal para llevar un camión pesado nos sacamos los carnés e hicimos el curso para el transporte de mercancías. Para poder gestionar la empresa no solo hay que tratar de saber de números y de organización, también hay que conocer de primera mano el contexto práctico en el que das las ordenes a tus trabajadores".

Desde que se hicieron cargo de la empresa, los hermanos Munarriz han duplicado la flota y ahora cuentan con 25 cabezas tractoras con sus respectivos chóferes. "Nos gusta que cada conductor tenga su vehículo. Es una forma de cuidar al personal. Se le aporta valor y comodidad al chofer; está mucho más tranquilo empleando su mismo camión siempre que sea posible".

Su empresa se dedica al transporte de graneles "de todo tipo y tanto en granulados como en polvo. Tenemos dos tipos de vehículos: cisternas y bañeras basculantes, en las que podemos llevar de todo, mercancías pulverulentas y granulados, abono, piedra, arenas...". Pero también el capítulo alimentario absorbe una parte importante de la actividad de la empresa. "Los clientes de alimentación son muy exigentes y quieren una trazabilidad de los vehículos que empleas", cisternas que se utilizan para uso exclusivo alimentario. Los destinos a los que llegan se sitúan sobre todo en la mitad norte de España y también en Francia.

Uno de los aspectos en el que incide Raimundo es en la importancia que va teniendo la digitalización de las empresas del sector. Su empresa está asociada a Tradisna, organización enfocada sobre todo a los transportistas autónomos, con una edad media "bastante elevada", señala, lo que implica que a menudo son más bien "reacios" a la implantación de tecnologías nuevas en el sector". Tradisna hace una "labor pedagógica muy importante" en ese sentido. La digitalización "es importante adoptarla convenciéndote de su utilidad, no como algo forzado. Si te la imponen, tiendes a rechazarlo. Pero si la usas y ves que te ayuda a progresar y a hacer el trabajo más fácil, es cuando te convences". En la gestión de la empresa explica Raimundo que están trabajando en la implantación de un programa porque, antes, "con diez camiones, su padre y su tío llevaban a mano, con papel y boli, todo el papeleo y la contabilidad, pero con 25 camiones es impensable y se te rompen los esquemas".

En cuanto a las tecnologías de los vehículos, "hoy en día un camión es una máquina alucinante. Tienen infinidad de funciones y hasta a los propios conductores les cuesta adaptarse. Asistentes a la conducción, guiado, avisos acústicos, distancia de seguridad..." Y esas máquinas rodantes cada vez más sofisticadas también están subiendo de precio de forma muy importante. "Hoy para comprar un camión nuevo partes de cien mil euros, sin contar con el IVA. Los precios de los vehículos, desde que empezó a notarse la inflación han subido "entre un 20 y un 30%" y esa circunstancia "está forzando a muchas empresas a mantener los vehículos que ya tenían. Antes las grandes empresas hacían operaciones con sus camiones de renting, leasing a tres años, y después se deshacían de él y los reemplazaban por uno nuevo. Hoy los tienen que alargar porque no hay ese repuesto", explica.

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