Chivite habla de buenas perspectivas de futuro para VW a pesar del "valle" en la producción con la salida del Polo

Pamplona

La presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, se ha mostrado "optimista" sobre el futuro de Volkswagen Navarra a pesar del reciente anuncio sobre el cese de la producción de la gama Polo a partir de 2024. Explica la presidenta que se trata de un "valle" en la producción hasta la puesta "en pleno funcionamiento" de la fabricación del vehículo eléctrico y por lo tanto considera que las previsiones de futuro son buenas. "Si no hubiera vehículo eléctrico no estaríamos hablando de un valle sino de la desaparición de la planta" ha expresado.

Según Chivite "hay unas perspectivas a futuro buenas" con la llegada del vehículo eléctrico a la planta de Landaben y recuerda que Volkswagen tiene prevista "una inversión de más de mil millones" en los próximos años. Aun así, asegura que hay que procurar que ese "valle" sea el menor posible y afecte al menor empleo posible. La presidenta confía en que así sea ya que la trayectoria de la planta siempre ha sido así, apostando por que haya un acuerdo entre dirección y el comité de empresa" que minimice el impacto en el número de trabajadores".

Por otro lado, explica la presidenta que otro de los aspectos que impacta directamente en este "valle" es la normativa Euro 7, una regulación que establece los límites de emisiones de contaminantes de los vehículos nuevos que se venden en Europa. Con la entrada en vigor en 2025 de la normativa Euro 7, Volkswagen asumiría importantes sobrecostes en la adaptación del Polo a un modelo más sostenible. Ahora, tras anunciar la retirada de este modelo de la planta de Pamplona, se allana también el camino y se deja espacio para la llegada del coche eléctrico.

Aun así, la presidenta de Navarra ha anunciado que la segunda quincena del mes de abril se reunirá en Bruselas con la Comisión Europea para trasladarle "la necesidad de acompasar esa apuesta por la descarbonización con la transformación que tiene que hacer la industria para que la afección en el número de empleos sea el menor posible".

Chivite asistirá a esa reunión de la mano del presidente de Volkswagen en Navarra y también del Cluster de Automoción que "ya están convocados". Asume que "no es una competencia de Navarra" porque se trata de una normativa europea y corresponde a los países en el marco de la Unión Europea, pero, acude con la idea de trasladar su "preocupación" sobre todo en la afección del empleo de la empresa Volkswagen.

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Cree que la planta navarra está "muy comprometida" con la fabricación de los vehículos eléctricos y por lo tanto cree que "va cumpliendo" pero asegura que lo importante es acompañar esa transformación de la industria y el compromiso con una industria más sostenible "garantizando el empleo". Para la presidenta la norma debe ayudarnos a "acompasar" y también ayudaría a que "ese valle en la producción sea el menor posible" concluye.

Volkswagen Navarra y Polo

La dirección de la planta de Volkswagen Navarra, en el polígono Landaben de Pamplona, se ha reunido este martes con el Comité de Empresa de la fábrica para exponer los planes de producción de la marca alemana para los próximo años. El aspecto más destacado de esos planes es que la planta dejará de fabricar el modelo Volkswagen Polo en 2024, 40 años más tarde de ensamblar el primer coche de esa gama, el denominado A02. Se trata de una decisión esperada, ya que la intención de la marca alemana es que este modelo se fabrique únicamente en la planta de Sudáfrica y se prepare Landaben para la transición hacia los dos modelos eléctricos que se comenzarán a ensamblar allá a partir de 2027.

A partir de abril de 2024, VW Navarra solo producirá dos de los tres modelos que tiene actualmente (Taigo y Tcross), una producción insuficiente para mantener a una plantilla que está cerca de las 5.000 personas. El presidente del Comité de Empresa por UGT, Alfredo Morales, ha detallado en la SER que, “lo dramático" es que sin el Polo y con las obras de electrificación de la fábrica, "para 2025 solo tenemos una producción prevista de 150.000 coches y bajando, lo que afectará al 50% de la plantilla”. Una situación complicada que se prevé que dure algo más de año y medio, hasta que empiecen a fabricar los modelos eléctricos.