Esto es lo que entiende tu perro cuando le mencionas la palabra preferida de toda mascota
Los canes son miembros fundamentales de las familias y comprenden más de lo que pensamos
Perro / Anita Kot
Los perros se han convertido en algo más que mascotas. En los últimos tiempos se ha evolucionado mucho en el bienestar animal a través de la concienciación de la sociedad y también de los estamentos, que han llevado a cabo legislaciones y normativas para asegurar que tengan una vida plena, segura y lo más cómoda posible, lo que se ha traducido incluso en una mayor esperanza de vida de ellas.
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La lealtad de los canes y el amor incondicional que dan son las dos grandes claves que han hecho que la relación con los humanos se haya afianzado mucho más que la de otros animales domésticos. Vemos historias verdaderamente sorprendentes de la afinidad que se genera con las personas, como decimos, hasta el punto de que se convierten en uno más de la familia. Todo esto ha hecho que nos centremos en ellos en todos los ámbitos.
Con tal importancia, nos centramos mucho en conocer todo lo posible sobre los perros, en todas sus vertientes. Así, se han desarrollado muchos estudios para indagar aún más, como por ejemplo en algo tan esencial como el entendimiento que tienen del mundo. Nuestra conexión es tan grande que solemos abrirnos e incluso hablar de cosas con ellos que no seríamos capaces de desvelar a otras personas. Pero ahí entra una pregunta, ¿realmente nos entienden los perros? Varias investigaciones han intentado desvelar si esto es posible.
Perro mirando por la ventana / Catherine Falls Commercial
Perro mirando por la ventana / Catherine Falls Commercial
¿Qué entienden los perros?
La web To pet mou recopiló información de varios estudios para dar respuesta a la pregunta de si los perros son capaces de saber lo que les estamos hablando, basándose en las conclusiones que han sacado diferentes investigadores. Y estas son claras. Nuestros amigos peludos no pueden entender el significado de las palabras como nosotros, pero sí que tienden a asociarlas con ciertas acciones específicas. Ellos pueden percibir nuestra voz y diferenciarla de entre todas las demás, pudiendo también relacionar sonidos, combinados con el tono en que se dicen, con situaciones cotidianas.
En el medio antes mencionado ponen como ejemplo el momento en el que les decimos que vamos a ir a la calle a pasear, unas palabras que quizá no entiende en el mismo sentido que nosotros pero que a través de la costumbre conocen que están relacionadas con salir a hacer sus necesidades y poder jugar en el exterior. Así, son capaces de hacer lo mismo cuando les vamos a dar premios o cuando escuchan el timbre de nuestra casa, en este último caso asociándolo a que puede venir algún extraño y, seguramente, ya lo habrán olido antes de sonar el portero.
Los canes analizan el tono y el volumen de la voz relacionándolos con nuestras emociones y pudiendo saber el sentido de lo que les estamos diciendo, además, son capaces de leer el lenguaje corporal y los gestos, es por ello que a veces no hace falta que les dirijas ninguna palabra y con un solo movimiento de mano entienden que quieres que se acerquen o que vayan a otro lado. Y, como todo, esto es posible con la base de todo aprendizaje: la repetición.
Lo van aprendiendo desde que comienzan las interacciones con los humanos, y a base de ver a menudo las mismas cosas, se empapan de todo lo que va sucediendo. Así, aunque no sepan el significado de lo que les decimos de manera concreta, ten por seguro que tu perro está entendiendo mucho más de lo que crees, sobre todo a nivel emocional y conductual.
A cara de perro: Educación Canina
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