Una novia camina hacia el altar el día de su boda y la sorpresa salta cuando se encuentra a los dos amores de su vida
El novio se encargó de que su prometida tuviera todo lo que anhelaba en ese día especial
Novia caminando hacia el altar / Neustockimages
Las bodas son momentos de recogimiento y alegría en las que los contrayentes dan uno de los pasos más importantes de sus vidas decidiendo unirla junto al otro. Es por ello que se suele invitar a familiares y amigos, pues compartir un momento tan trascendental con tus seres queridos hacen de él aún más especial. Sin embargo, a veces no todos pueden estar, por diferentes motivos.
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Los animales están cada día más integrados en las familias y son tratados como uno más del entorno, aunque hay varias dificultades para llevarlos a algunos sitios en los que o no son bienvenidos o, por motivos de logística, no pueden acudir. Este era el caso de Echo, la mascota de una pareja que se casaba en abril del año pasado y que no iba a contar con la presencia de su amigo peludo.
Jennifer Dela Fuente, la novia, estaba muy disgustada de que no pudiera asistir al enlace porque para ella y el que ya es su marido es como si fuera un hijo, pero todos aquellos que podrían cuidarlo de la mejor manera estaban en la ceremonia y fiesta posterior y no iban a poder estar demasiado pendientes de él. Así, tuvo que resignarse con pesar a que no estuviera en el día más importante de su vida... o eso pensaba.
Un momento emocionante e inesperado
Cameron, el novio, ideó un plan un par de semanas antes de la boda para conseguir que el perro pudiera estar presente y darle una sorpresa a Jennifer. "Fue una decisión improvisada de último momento, porque sabía lo mucho que ella lo quería allí", dijo a People tiempo después, explicando que le pidió a su ayudante "que lo recogiera en la casa de una de las damas de honor de Jenn". Ella no tenía ni idea de lo que se estaba 'cocinando'.
"Unos 30 minutos antes de la ceremonia, recibí una notificación en mi teléfono, que estaba conectado al collar de Echo, que decía que había salido de la casa", comentó la novia al mismo medio, pero afirma que "una de mis damas de honor me aseguró que no era lo que yo pensaba, así que caminé hacia el altar y realmente no tenía idea hasta que doblé la esquina". La sorpresa y la emoción fue absoluta, como se pudo captar en las imágenes que se tomaron.
Cacie Carroll, la fotógrafa del enlace, consiguió capturar fotos y vídeos del momento en el que Jennifer se llevó ese inesperado regalo, viendo en el altar a su prometido junto con Echo. Ella llegó con una emoción tremenda a acariciar y dar la bienvenida a su Golden Retrevier de apenas un año, que estaba aún más feliz de verlos allí. "Que todo saliera bien fue la mejor sensación del mundo", confesó la novia, que a partir de ese momento pensó que "independientemente de cómo transcurra el resto del día, este es mi final perfecto".
"Y fue el día perfecto. Las fotos son muy, muy especiales para nosotros y las atesoraremos por siempre", afirmó la novia, mientras que la fotógrafa aseveró que ver a "Echo caminando hacia el altar era el epítome de la 'energía de un Golden Retriever'". "Echo estaba muy feliz de ver a su papá en la parte superior del pasillo y aún más emocionado de ver a su mamá caminando hacia abajo, como se puede ver en el video, ¡mueve la cola un montón!", dijo Carroll. El documento gráfico al que se refiere se subió a TikTok y acumula casi 100.000 me gustas y unos 270 comentarios.
