Alertan de que esto es lo que le puede pasar a tu coche si sigues conduciendo con la luz de reserva encendida
La avería por falta de combustible puede resultar en multas
Reserva de combustible.
Son muchos los conductores que llegan conducir con la luz de reserva de gasolina encendida, tratando de estirar al máximo el combustible restante antes de repostar. Sin embargo, esta práctica puede tener serias consecuencias para el coche.
El combustible, ya sea gasolina o diésel, contiene pequeñas partículas y sedimentos que tienden a acumularse en el fondo del tanque con el tiempo. Cuando el nivel de combustible está bajo, la bomba de combustible comienza a succionar estos sedimentos, que pueden obstruir filtros e inyectores. Esto puede resultar en averías en el sistema de inyección de combustible, causando fallos en el motor y aumentando los costos de mantenimiento.
La bomba de combustible es responsable de succionar el combustible del tanque y enviarlo al motor. Cuando el nivel de gasolina está bajo, la bomba necesita trabajar más para realizar esta tarea, especialmente en subidas, bajadas o curvas. Este esfuerzo extra puede causar sobrecalentamiento y desgaste prematuro de la bomba, reduciendo su vida útil y llevando a reparaciones costosas.
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Otro riesgo de conducir con la luz de reserva encendida es la posibilidad de entrada de aire en el sistema de combustible. Cuando el nivel de gasolina está muy bajo, la bomba puede succionar aire junto con el combustible, lo que puede causar fallos en el motor y daños al sistema de inyección. Este problema es particularmente grave en vehículos diésel, donde la presencia de aire en el sistema puede impedir el funcionamiento adecuado del motor.
Conducir con la luz de reserva encendida también puede llevar a un aumento en el consumo de combustible. Cuando el nivel de combustible está bajo, el filtro de combustible puede no funcionar de manera eficiente, permitiendo que impurezas pasen al sistema de inyección. Esto puede resultar en una combustión menos eficiente, aumentando el consumo y los costos a largo plazo.
Además de los daños mecánicos, conducir con la luz de reserva encendida puede representar un riesgo para la seguridad. La posibilidad de quedarse sin combustible en una carretera concurrida o en una zona aislada puede poner al conductor y a los pasajeros en situaciones peligrosas. Además, la avería por falta de combustible puede resultar en multas y otros inconvenientes legales.
