“¿Cómo le decía esto a un niño?”: Buenafuente recuerda los chistes que le contaba su padre y Berto acaba con un ataque de risa
Andreu Buenafuente ha dejado bastante claro que el humor le viene en la sangre

“¿Cómo le decía esto a un niño?”: Buenafuente recuerda los chistes que le contaba su padre y Berto acaba con un ataque de risa
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Madrid
Andreu Buenafuente no es el único humorista de su familia. A pesar de que sí que es el que ha tenido más reconocimiento a nivel social, todo ello gracias a su gran labor para la industria a lo largo de estas últimas décadas, el catalán se ha criado con personas que siempre han abrazado la gracia. Entre ellos su padre, Joan Buenafuente, quien siempre conseguía sacarle una sonrisa a todos a pesar de que tenía seis o siete chistes repetitivos. Así lo ha dado a conocer el humorista en el último programa de Nadie Sabe Nada, donde ha compartido con la audiencia algunos de esos chistes tan característicos.
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Todo ello a raíz de la duda de uno de sus oyentes, quien le ha preguntado a Andreu Buenafuente y Berto Romero acerca de los poderes divinos de los curas: "Señores del humor, ¿Qué pasaría si un cura bendice el océano? ¿Todo el océano se vuelve agua bendita o los curas tendrán hasta cierto alcance de bendición? ¿El rango de alcance depende del nivel de cura? ¿Y si es así, el papa puede bendecir todo el océano?". Una duda existencial que ha llevado a los humoristas a hablar acerca de los curas y que inevitablemente haya llevado a Andreu Buenafuente a recordar uno de los chistes habituales de su padre.
"Todo esto es bragueta"
Principalmente porque, cada vez que ambos veían un cura, siempre acababan riéndose del mismo chiste: "Mi padre, cuando veía un cura que llevaba una sotana con todo botones, me decía que todo aquello era bragueta". Un chiste que le hacía mucha gracia a Andreu Buenafuente y también al público asistente al programa, quien no se esperaba un chiste de este calibre. Mientras tanto, el humorista reconocía que su padre era un asiduo a eso del humor: "Algún día os hablaré de mi padre en profundidad, pero es increíble la incorrección que manejaba".
Algo sobre lo que no ha reflexionado hasta hace bien poco, cuando llegó a la conclusión de que su padre le hacía bromas no aptas para su edad: "No ha sido hasta que me he hecho mayor cuando he pensado que cómo podía decirle eso a un niño. No lo teníamos en cuenta y nos sorprendía". Mientras el público trataba de recomponerse, Berto Romero protagonizaba un ataque de risa que no ha hecho más que contagiar al resto de personas presentes en el teatro: "Mira que me lo habías contado, pero es que me ha pillado por sorpresa".
Los chistes de cementerio
En ese momento, Andreu Buenafuente ha explicado que un padre tiene tres o cuatro bromas recurrentes. En el caso de su padre puede que fueran alguna que otra más, pero lo cierto es que asegura que acababa siendo repetitivo: "Cada vez que veías venir a un cura decía ya viene con lo de la bragueta". Lo mismo le pasaba cada vez que pasaban por un cementerio, cuando Andreu Buenafuente tenía bastante claro lo que le iba a decir su padre.
Principalmente porque tenía dos chistes típicos: "Cada vez que pasábamos por el cementerio me decía que aquí estaban los que habían dejado de fumar. También que aquí se podía hablar sobre cualquier cosa porque nadie te iba a llevar la contraria. Tenía unos cuantos chistes".

David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología que aborda la vida digital desde otro punto...