La gran diferencia entre hombres y mujeres a la hora de insultar en España
La filóloga María Méndez explica qué hacemos diferente en esta acción tan cotidiana
La gran diferencia entre hombres y mujeres a la hora de insultar en España
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¿A quién no le sale, de manera incluso inconsciente, insultar al aire si llega al coche y tiene una multa o si se deja las llaves dentro de casa? Los insultos forman parte de nuestra lengua y no sería una locura afirmar que los utilizamos a diario.
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Pero, ¿insultamos todos de la misma manera?, ¿los insultos cambian con la edad?, ¿y según el lugar de procedencia? La filóloga, doctora en Lengua Española y profesora en la Universidad de Vigo, María Méndez, ha pasado por los micrófonos de la 'Hora 25' para explicar las similitudes y las diferencias en la forma de insultar que aún predominan entre hombres y mujeres.
"Lo que está permitido"
Al contrario de lo que podríamos esperar, María Méndez explica que su estudio ha comprobado que no hay tanta distancia en la manera que tienen de insultar los hombres frente a la manera en la que lo hacen las mujeres. Aunque los resultados no permitían conocer qué sexo insulta con mayor frecuencia, lo que sí han podido averiguar es que los insultos empleados, al menos en situaciones genéricas donde no se busca ofender de una manera concreta, por ejemplo, con palabras racistas u homófobas, son muy similares.
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Las entrevistas de Aimar | María Méndez, filóloga
La única diferencia que Méndez ha detectado en sus análisis es que, en el caso de los hombres, "payaso" es un insulto al que suelen recurrir con frecuencia, algo que la experta ha afirmado que "a mí es un insulto que no me saldría, no lo usaría". Por su parte, las mujeres suelen tirar más a menudo de "estúpido". "Yo entiendo que viene de esa manera sutil a lo que es la feminidad, lo que está más o menos permitido."
En España, las mujeres tienen la suerte de poder insultar con libertad, pero la filóloga destaca que los resultados serían muy distintos si mirásemos a países como Irán o Japón. "Las respuestas son diferentes, claro. No insultan la misma cantidad, no está permitido para las mujeres insultar y, además, hay insultos que se consideran muy masculinos. Una mujer no debería decirlos si no quiere que la sociedad piense cosas de ella", sostenía.
