La expresidenta de Adif revela en el Supremo que Ábalos y Koldo García se interesaron por dos adjudicaciones
Isabel Pardo de Vera declara como testigo que también preguntaron por contrataciones en Ineco, donde acabó empleada Jéssica, la exnovia del ministro

La expresidenta de ADIF Isabel Pardo de Vera a su llegada al Tribunal Supremo en Madrid donde el juez que investiga el caso Koldo toma declaración este miércoles a varios testigos / Rodrigo Jimenez (EFE)

Madrid
La exsecretaria de Estado de Transportes y expresidenta de ADIF Isabel Pardo de Vera ha declarado este miércoles como testigo en el Tribunal Supremo y ha revelado que tanto el exministro José Luis Ábalos como quien era su asesor, Koldo García, se interesaron por dos adjudicaciones de tramos de vía en las que, según aseguraban, las empresas adjudicatarias no estaban cobrando en tiempo y forma.
Pardo de Vera comparecía en la tanda de testigos convocada por el magistrado Leopoldo Puente para contrastar las acusaciones vertidas por el comisionista Víctor de Aldama, quien asegura que además de la trama de mascarillas objeto de la investigación, subyacía una trama de mordidas a cambio de obra pública en el Ministerio de Transportes que dirigía Ábalos.
Según informan en fuentes jurídicas a la Cadena SER, la expresidenta de Adif respondía así preguntada directamente por una de las afirmaciones de Aldama, quien refirió que ella personalmente se había quejado al ministro de una batería de adjudicaciones que podían tener detrás la influencia de Koldo García.
Lo que ha señalado en este punto es que recordaba que "Koldo y el ministro" la llamaron en una ocasión para contarle que había dos empresas contratadas por Adif a las que no se les estaban abonando las obras, cosa que a ella le extrañó porque según ha detallado, no tenían problemas de tesorería. Preguntó, conforme ha contado, y no había impago alguno así que dijo a ambos que si las empresas tenían alguna queja, acudiesen al contencioso.
Ha precisado además de qué proyectos se trataba. Una era, de acuerdo a las fuentes consultadas, Levantina Ingeniería y Construcción (LIC), la misma a la que ha puesto en el disparadero Aldama al asegurar que participaba en un supuesto sistema de preadjudicaciones de obra pública a cargo de mordidas. Pardo de Vera ha apuntado que su responsable, José Ruz, estaba "a veces" en el ministerio con Koldo García. La otra era Muries, de acuerdo a su declaración, que desarrollaba desde hacía años un proyecto en UTE en el País Vasco que estaba ya en fase de liquidación.
El trabajo de Joseba García
A lo largo de su declaración, ha aflorado también otro asunto. Pardo de Vera trabajó en 2007 en INECO, la empresa pública donde después se desempeñarían el hermano de Koldo, Joseba García, y Jessica R., la entonces novia del ministro Ábalos, quien habría estado cobrando sin acudir ni un sólo día a trabajar. El fiscal jefe de Anticorrupción, Alejandro Luzón, le ha preguntado si Ábalos le pidió algún favor sobre su pareja y ella ha desvelado que algo sí se interesaron.
En concreto, según las fuentes consultadas por la Cadena SER, ha referido que "Koldo y Ábalos" le preguntaron sobre la posibilidad de que Ineco contratase personal administrativo y específicamente se interesaron por colocar en la empresa pública a Joseba García. Ella, de acuerdo a su declaración, les remitió a las ofertas de contratación de Ineco o, en palabras del magistrado, Leopoldo Puente, les dijo que "se buscasen la vida".
Ha habido tiempo además para preguntas sobre su relación con Aldama, quien viene insinuando que era fluida. Pardo de Vera no ha negado la posibilidad de que el comisionista tenga su número de teléfono y no sabía concretar si llegaron a tomar juntos algún café, pero ha negado que comiesen juntos y ha subrayado que no le gustaba verle de forma tan asidua en el Ministerio de Transportes, incluso en áreas restringidas. Llegó a decírselo a Ábalos y a partir de ahí, no volvió a encontrarse con él por los pasillos.