Xavier Sardà revela, 20 años después, por qué dejó ‘Crónicas marcianas’: “Me dijeron que no lo hiciera, que era un insensato”

Madrid

Xavier Sardà ha visitado esta semana El Mono desnudo. Un nuevo videopodcast de la Cadena SER, presentado por Juan Carlos Ortega, en el que el humorista explora el lado más humano de todo tipo de personalidades con preguntas de lo más personales. Después de conocer al Gabriel Rufián más íntimo, quien se convirtió en el maestro de ceremonias de este nuevo formato, el humorista se ha citado con el periodista catalán para descubrir qué hay detrás de uno de los presentadores más famosos de la historia de la televisión reciente. Y lo cierto es que la entrevista ha dado para mucho prácticamente desde el primer minuto.

Principalmente porque no ha tardado más que tres minutos en dejar uno de los grandes titulares de la entrevista. Todo ello después de que le preguntaran acerca de las razones por las que decidió poner punto y final a Crónicas Marcianas. En primer lugar, Xavier Sardà ha reconocido que lo hizo simplemente porque le dio la gana: "No hay más". Sin embargo, sí que había más de una razón que le llevó a tomar la que sin duda alguna fue una de las decisiones más complicadas de su carrera en los medios de comunicación.

"Me levantaba exhausto"

En declaraciones a la Cadena SER, Sardà ha recordado que, en el momento que decidió dejar Crónicas Marcianas, llevaba ocho años acabando el programa a las dos de la madrugada: "Al final me iba a dormir a las 2:45. Yo no sabía dormir por la mañana y me levantaba exhausto". Un ritmo de vida, cuanto menos frenético, que le llevaba a experimentar situaciones bastante complicadas: "Me levantaba y tenía que preparar el programa el día siguiente. Luego me pegaba unas siestas a media tarde en las que perdía absolutamente conocimiento. Me despertaba y me preguntaba si seguía en el mismo día o si había pasado al siguiente".

Por todo ello, el presentador de televisión prefirió dejarlo todo y descansar: "Lo dejé porque ya estaba cansado, pero fueron 8 años memorables". Una respuesta que ha sorprendido a Juan Carlos Ortega, quien reconoce que debe ser una decisión muy complicada de tomar: "Hoy en día no se entiende esto. Estabas en un momento de super éxito en el que nadie te eclipsaba. Hacías unas audiencias de la hostia y estabas ganando una pasta inhumana. Y aún así lo dejaste". El presentador de televisión prevaleció su vida sobre su trabajo, y no se arrepiente.

Un adiós necesario

¿Y cómo se lo tomaron los responsables del programa? En declaraciones a la Cadena SER, Sardà recuerda que le dijeron que no lo hiciera, que era un insensato. No obstante, el periodista decidió seguir a su cuerpo y poner fin a su etapa en la televisión: "Cuando yo estaba en la SER, La Ventana estaba muy bien a nivel de audiencia. Pero en ese momento tuve que decidir y acabé allí para empezar en la tele para sustituir a Pepe Navarro con Crónicas Marcianas. Ocho años más tarde, y con Crónicas Marcianas en lo más alto, Sardà repitió la jugada y dejó su programa en lo más alto.

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Tras su paso por Crónicas Marcianas, el presentador se tomaría varios años de descanso hasta volver nuevamente a la televisión. En 2007 se pondría al frente del programa Dutifrí y, después de este, colaboraría en muchos más. Desde algunos proyectos como La Tribu o Tú sí que vales hasta El Gran Debate, la Sexta Noche o Liarla Pardo.