Las mayores injusticias de la historia de los Oscar: hay casos absolutamente hirientes

Madrid

Los Premios Oscar han reconocido este fin de semana a la película Anora como la mejor del año. Una decisión que ha pillado por sorpresa a muchos, quienes pensaban que la estatuilla más esperada de la noche podía ser para otros títulos como The Brutalist, Emilia Pérez o The Substance. Sin embargo, la academia ha decidido premiar a esta comedia anti Pretty Woman que destaca entre otras cosas por la interpretación de una Mikey Madison quien se ha hecho con su primer Oscar con tan solo 25 años. ¿Crees que es la justa ganadora de la edición? ¿Había otras opciones mejores que esta?

La Academia no siempre premia a las mejores películas y, los casos que te mostramos en el último programa de Sucedió una noche, no son más que un ejemplo de ello. A pesar de que entendemos que en este asunto todo es cuestión de opiniones, y que cada uno tendrá la suya sobre qué película tenía que haber ganado tal año, hemos escogido unas cuantas ediciones en las que más o menos hay un consenso mayoritario de que no se hizo justicia con el premio. Un recorrido que empieza en 1945, cuando Siguiendo mi camino se impuso a Perdición, una de las grandes obras del cine negro.

Desde Taxi Driver hasta Toro Salvaje

En 1952, el Premio Oscar a mejor película fue para la película El mayor espectáculo del mundo. Una decisión, cuanto menos polémica, que provocó que otras cintas históricas como Solo ante el peligro o El hombre tranquilo no recibieran el premio que probablemente merecían. A lo largo de la historia hay muchos títulos de primer nivel que nunca consiguieron la tan ansiada estatuilla. Entre ellas la icónica Taxi Driver, quien sucumbió en el año 1977 frente a Rocky Balboa: "La encarnación del sueño americano pudo más que la visión pesimista de la en este caso pesadilla americana que ofrecía Scorsese".

En 1980, la película Kramer contra Kramer se impuso a otra cinta histórica como Apocalypse Now, quien probablemente se quedó sin la estatuilla porque, apenas un año antes, el premio a mejor película del año fue para otra cinta basada en la guerra de Vietnam como fue El Cazador. Un año después, en 1981, el premio fue a parar para la película Gente corriente cuando muchos piensan que debería haber sido para otras cintas como Toro Salvaje o El Hombre Elefante.

El lío con La La Land

Dos años más tarde, en 1983, la película Gandhi vencería a una película para la historia como sería E.T. Mientras tanto, en 1990, Paseando a Miss Daisy ganó el premio principal de la noche dejando a otras como Nacido el cuatro de julio en la cuneta. Y hay muchos ejemplos más. En 1999, la Academia reconoció a Shakespeare in love como mejor película del año y dejó a Salvar al soldado Ryan sin el premio principal de la noche.

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En el año 2006, Crash se llevó la estatuilla a la mejor película cuando realmente debería haber sido, según la crítica especializada, para una cinta icónica como Brokeback Mountain. En 2011 ganó El Discurso del Rey. Una película que, sin embargo, no trascendió como la historia de La Red Social basada en el nacimiento de Facebook y la historia de Mark Zuckerberg: "Muchos no se lo explican". Por último, en el año 2017 fuimos testigos de la victoria de Moonlight sobre la icónica La La Land.