Berto Romero ha soñado que su mujer le era infiel con Andreu Buenafuente y señala lo que más le ha molestado: "Me hizo tanto daño..."

Madrid

Berto Romero tiene sueños bastante peculiares. Así lo ha dado a conocer este fin de semana en un nuevo programa de Nadie sabe nada, en el que el humorista ha compartido con Andreu Buenafuente y el público algunos de los más surrealistas: "Yo sueño cosas muy raras. Esta noche he soñado que llevaba a urgencias a un tío que tenía asma. Yo estaba caminando por la Puerta del Sol y, de pronto, este hombre me asaltaba para decirme que le estaba dando un ataque de asma y que necesitaba mi ayuda". En ese momento, Berto Romero decidía parar a un taxi para que les llevara lo más rápido posible hasta el hospital más cercano.

Pero el enfermo no presentaba signos aparentes de cualquier posible ataque de asma, lo que llevó a Berto Romero a pedirle que fingiera un poco los síntomas para llegar antes al hospital: "El tío estaba normal y no colaboraba, así que le azuzaba y le pedía que fingiera para que le viera más asma". Sin embargo, esta persona le explicaba que se estaba ahogando pero que tampoco tanto como para montar una auténtica escena sobre el taxi. No obstante, este siguió las indicaciones y comenzó a fingir con el objetivo de que el taxista se diera mucha más prisa. Pero este no es el sueño más raro que ha tenido durante estos últimos días.

"Me hizo tanto daño..."

Hace cosa de una semana, Berto Romero soñaba que su mujer le había sido infiel con Andreu Buenafuente: "No hagáis broma sobre este tema porque es una relación saneada". Todo ello mientras todo el público presente en el teatro Olympia de Valencia no podía contener la risa ante lo que estaba por venir. Después de tranquilizar un poco esta euforia inicial, el humorista comenzaba a hablar sobre el sueño en cuestión: "Hace una semana, en el sueño, mi mujer viene y me dice que ha llegado un poco tarde porque estaba haciendo el amor con el Andreu".

Una escena que ofendía incluso al propio Andreu Buenafuente, quien reconocía que se sentía incluso un poco mal por lo sucedido durante el sueño. Pero esto no fue lo que más le molestó a Berto Romero: "Lo que más me molesto no fue eso, sino la frase que me dijo después". Después de explicarle que se había acostado con su mejor amigo, la mujer de Berto le confesaba que Andreu Buenafuente estaba muy bien: "Está fuerte el Andreu, ¿eh?". Una frase que, sin duda alguna, fue la que más le dolió: "Me hizo tanto daño...".

"Perdona, pero es que como sois tan amigos..."

Mientras que Berto Romero no daba crédito a las palabras de su mujer, esta trataba de justificar lo que había hecho: "Perdona, pero es que como sois tan amigos...". En ese momento, Andreu Buenafuente ha llegado a la conclusión de que la mujer de Berto tenía una visión un poco distinta de la amistad entre ellos dos: "Ella creía que, en la virtud de la amistad, se podían permitir una serie de cosas".

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Sin embargo, Berto Romero reconoce que, en la vida real, las cosas son completamente distintas al sueño: "En la realidad, cuando habla de ti, dice que le das asco. Se imagina esa piel gomosa como de monedero viejo y le dan como arcadas".