Pablo Simón explica qué hay detrás de la nueva "era dorada" de EEUU y advierte que Trump puede llegar más lejos que nunca

Madrid

Donald Trump ha sido investido este lunes como nuevo presidente de los Estados Unidos. El inicio de una nueva era en la que el multimillonario se ha propuesto llevar a su país hacia lo que él considera su "era dorada" junto a personalidades de la talla de Elon Musk. ¿Cuál es su plan? En declaraciones a la Cadena SER, el politólogo Pablo Simón ha llegado a la conclusión de que esta segunda era de Trump está basada "en una impugnación total de los consensos racionales a los que habíamos llegado como sociedades de progreso". Todo ello para, a continuación, señalar que hay una gran diferencia entre la primera etapa de Donald Trump en el gobierno de los Estados Unidos y la segunda.

Bajo su punto de vista, el primer mandato de Donald Trump fue algo más improvisado. El candidato republicano llegó al poder con su objetivo de devolver la grandeza a Estados Unidos sin una hoja de ruta concreta. Sin embargo, todo ha cambiado: "Esto que estamos viendo ahora no es algo improvisado. Claramente hay un plan. Se sabía cuál iba a ser la agenda y también lo que está por venir también". Para entender este fenómeno, el politólogo se apoya en las palabras de Clara Ramas en su libro El tiempo perdido, donde explica que estamos en un momento de traducción política de la melancolía y los proyectos reaccionarios.

El discurso de Donald Trump

Una era idónea para personajes como Donald Trump, quienes han conseguido calar profundamente en la sociedad gracias a un mensaje con el que llama a recuperar la grandeza perdida como país: "En el fondo suponen una impugnación del presente para volver a un pasado que nunca existió. Y eso es exactamente lo que estamos viendo en el caso Trump cuando dice que va a restaurar otra vez la grandeza de los Estados Unidos. Está prometiendo a futuro el paraíso perdido. Esto es algo enormemente potente como mensaje político y estamos viendo que entra como un cuchillo en mantequilla".

Por si esto fuera poco, el nuevo presidente de los Estados Unidos tendrá plenos poderes para hacer prácticamente lo que le apetezca durante estos dos primeros años de mandato. Todo ello porque los republicanos son mayoría tanto en la Corte Suprema como en la Cámara de Representantes y el Senado, lo que le otorga vía libre para aplicar todas y cada una de sus medidas sin oposición alguna: "Es indudable que Donald Trump tiene por delante dos años de plenos poderes en Estados Unidos. No solo porque tenga una Corte Suprema con una mayoría conservadora clara, sino porque también tiene mayoría tanto en la Cámara como en el Senado".

La contrarrevolución reaccionaria de Donald Trump

Según cuenta Pablo Simón, Donald Trump será un presidente que tendrá amplios poderes tanto en el interior como en el exterior. A pesar de que la política estadounidense desarrolló un sistema de contrapesos para que los mandatarios no tuvieran tanta facilidad para sacar adelante sus propuestas, este no ha funcionado con Donald Trump gracias al apoyo recibido durante las elecciones del pasado mes de noviembre: "Van a ser dos años de contrarrevolución reaccionaria, eso es indudable".

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Por todo ello, el politólogo ha llegado a la conclusión de que el Donald Trump de 2025 puede llegar mucho más lejos que el que llegó a la Casa Blanca allá por 2016: "Va a ser una presidencia con amplísimos poderes y acompañada de un clima de opinión que le permite llegar mucho más allá de lo que había llegado en el año 2016. Y esto debería ser una señal de atención para la Unión Europea".