Preguntas y respuestas sobre las medidas del Gobierno para paliar la crisis de vivienda: de cómo desgravar el IRPF al modelo de avales

«Más vivienda, más regulación y más ayudas». Con esa filosofía, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este lunes un nuevo paquete de medidas para hacer frente a la crisis de acceso a la vivienda que golpea a España. El Ejecutivo busca usar la palanca fiscal como arma para intervenir el mercado en las comunidades autónomas del PP que se niegan a aplicar la Ley de Vivienda y propone una batería de 12 propuestas para pasar a la acción en esos territorios. Sin embargo, el paquete anunciado tiene flecos por concretar, se enfrenta a una larga negociación política y, sobre todo, deja un sin fin de dudas que intentamos resolver a continuación. Cinco de las doce medidas anunciadas por Pedro Sánchez requieren trámite parlamentario, así que todavía queda tiempo para desatascar el complejo acuerdo político que necesitan para llegar a tierra. Entre las medidas que necesitan pasar por el Congreso de los Diputados para conseguir la luz verde definitiva están algunas de las medidas estrella. Por ejemplo, la bonificación del 100% en el IRPF para aquellos propietarios que alquilen sus pisos a precios asequibles o el sistema de garantía de avales para propietarios e inquilinos. La propuesta del Gobierno pasa por ofrecer desgravaciones de hasta el 100% en caso de que los grandes propietarios alquilen su vivienda al precio que marca el precio de referencia que marca el Ministerio de Vivienda y que se puede consultar en su web. En las zonas con el mercado más caliente, este índice marca precios muy por debajo del valor de mercado. En zonas concretas de Madrid, por ejemplo, ese precio está hasta un 50% por debajo del de mercado. En todo caso, la filosofía de la medida es que el ahorro del propietario sea siempre superior al beneficio que obtendría si alquila su piso a un precio superior al que marca el índice de referencia. Aún está por definir. Fuentes del Gobierno señalan que el esquema de desgravaciones que están diseñando es similar al que existe en las denominadas zonas tensionadas. En esas regiones, los caseros pueden desgravarse hasta un 90% del IRPF si rebajan el precio del alquiler un 5% sobre el contrato anterior; o del 70% en caso de que arrienden a jóvenes de entre 18 y 35 años. La Empresa Publica de Vivienda ya está creada. En diciembre, se aprobó la reconversión de la actual Entidad Estatal de Suelo (SEPES) en la nueva Empresa Pública de Vivienda. Esta nueva entidad tiene como objetivo desarrollar de principio a fin todo el ciclo residencial. Es decir, será la encargada no solo de construir y urbanizar vivienda, sino también de gestionar los alquileres asequibles. Aún así, parece que todavía falta mucho tiempo para que los ciudadanos puedan acudir a una de sus oficinas para solicitar un piso a precio asequible. Las 3.300 viviendas y los casi 2 millones de metros cuadrados de suelo residencial que el Gobierno va a transferir a la Empresa Pública de Vivienda están repartidos por toda la geografía española. Se trata, en muchos casos, de inmuebles que están en proceso de urbanización o que todavía tienen que ser construidos o rehabilitados. Por tanto, parece que faltan meses para poder solicitar un alquiler asequible en esos inmuebles. El Ejecutivo solo ha detallado que habrá un «programa de ayudas» a la rehabilitación de viviendas vacías para destinarlas al alquiler asequible. Por el momento, no detalla ni la fórmula ni la cuantía de las mismas. Todo apunta a que el modelo elegido será similar al esquema de ayudas que ya está en vigor desde 2021 y que permite financiar entre el 40 y el 80% de las reformas. El Gobierno quiere promover la rehabilitación de vivienda ofreciendo más incentivos a aquellos que realicen reformas para posteriormente alquilar sus pisos a precios asequibles. Este es otro de los grandes flecos que dejan los anuncios del presidente del Gobierno. El Ejecutivo ha propuesto que los pisos turísticos tributen como «una actividad económica», pero no aclara la fórmula. Fuentes del Gobierno han detallado que trabajan en un modelo impositivo basado en la directiva comunitaria que se está debatiendo en Bruselas. Todo apunta a que será un esquema de tributación flexible: es decir, aquellos que tengan un alojamiento turístico en zonas de mayor tensión recibirán penalización fiscal superior. Por el contrario, es muy probable que la tributación no aumente en las zonas rurales o de la España vaciada, donde estas viviendas ayudan a la dinamización de la actividad económica. El Gobierno está todavía diseñando el modelo de avales, que irá destinado siempre a colectivos vulnerables. Uno de los grupos que se podrá acoger a este sistema es el de los inquilinos menores de 35 años. En este caso, los jóvenes podrán contar con una cobertura del Estado que asumirá el pago el alquiler durante el tiempo que ellos no puedan hacerlo. No hay más detalles. Además, el Estado también ejercerá de aval para que aquellos inquilinos que no pueden asumir el pago de una fianza o no cumplen los requisitos económicos para firmar un contrato de alquiler puedan hacerlo.

Preguntas y respuestas sobre las medidas del Gobierno para paliar la crisis de vivienda: de cómo desgravar el IRPF al modelo de avales

El paquete anunciado por Sánchez tiene flecos por concretar y se enfrenta a una larga negociación política

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