"Si no me voy con bronca, dejo el fútbol hoy": Muniain refleja la frustración de un San Lorenzo que no levanta cabeza

San Lorenzo enfila la recta final de la temporada de capa caída. Incapaz de salir de los puestos bajos de la clasificación, la frustración se ha instalado en las gradas del estadio Pedro Bidegain y el descontento se hizo más que notable al término del último partido. El 'Ciclón' volvió a caer en casa, 0-2 a manos de Belgrano, y el graderío estalló despidiendo a su equipo con un sonoro abucheo.

Todavía coleaba este escarmiento cuando los jugadores acudieron a la zona mixta. Aquí, pese a llevar poco más de dos meses en el club, Iker Muniain usó los mismos galones que ya le han llevado a portar el brazalete de capitán para asumir la responsabilidad ante los micrófonos. El tirón de orejas de su afición fue el tema central de esta comparecencia, aunque como reveló el propio futbolista no es sólo la afición de San Lorenzo la que mantiene una rabia incapaz de guardar.

"Es normal la bronca de la gente que quiere ver a su equipo ganar, la bronca que tenemos nosotros mismos porque no logramos salir para adelante. Es una situación realmente complicada, pero desde lo futbolístico creo que hay en lo que confiar", alegó Muniain ante los medios argentinos, alegando que en jornadas como esta última "se sale tragando todo el veneno" de su interior.

"Viví muchas situaciones así en mi carrera. De temporadas que son malas, que todo te viene en contra, que nada te sale bien, que te llegan una vez y meten dos goles...", expuso el español, a sabiendas del mal clima que generan estas situaciones y sumando su enfado al de los miles de aficionados que salieron del estadio con una decepción más: "Si no me voy con bronca, dejo el fútbol hoy. Es una situación anímica extrema. La bronca es máxima, estamos muy jodidos". San Lorenzo es 21º clasificado en una liga de 28 que se está haciendo eterna para la familia azulgrana.