Un estudiante descubre de casualidad una enorme ciudad maya con plazas y pirámides que reescribe la historia de la civilización
La ciudad pudo haber albergado entre 30.000 y 50.000 personas entre los años 750 y 850
Madrid
El arqueólogo estadounidense Luke Auld-Thomas ha descubierto recientemente una enorme ciudad maya en la región de Campeche (México) que revela nuevos detalles acerca de esta civilización perdida. Así lo ha dado a conocer este martes en la revista de divulgación científica Antiquity, en la que el estudiante de la Universidad Tulane (Estados Unidos) revela cómo ha sido el proceso para dar con esta reliquia que sin duda alguna será fundamental para seguir completando la historia de la ya extinta cultura maya: "Estaba como en la página 16 de la búsqueda de Google y me encontré con un estudio realizado por una organización mexicana para el monitoreo ambiental de la región".
Más información
Tras leer el estudio, y analizar las distintas imágenes tomadas por la organización mexicana a través de la técnica LiDAR, el arqueólogo descubrió por error una gran ciudad compuesta por más de 6.000 estructuras de la civilización prehispánica. Principalmente porque esta técnica permite a los investigadores mapear las estructuras enterradas bajo la vegetación a través de la tecnología láser y descubrir lo que hay bajo toda la maleza. De ahí que comenzara a encontrar todo tipo de estructuras que habían pasado desapercibidas durante cientos y cientos de años.
Acogió a 50.000 personas
Después de analizar la región, los responsables del estudio han llegado a la conclusión que se trata de la segunda ciudad en densidad después de Calakmul, considerado a día de hoy como la ciudad maya más grande de la antigua América Latina. Una ciudad, que pudo haber albergado entre 30.000 y 50.000 personas entre los años 750 y 850 después de Cristo, en la que se han identificado pirámides, campos deportivos e incluso calzadas que conectan los distintos distritos de la ciudad. Tras este hallazgo, la ciudad pasa a ser conocida como Valeriana en honor a una alguna cercana al asentamiento maya.
Una hallazgo que, sin duda alguna, nos obliga a reestructurar lo que sabíamos hasta la fecha sobre cultura maya. Principalmente porque, tal y como apunta el profesor Marcello Canuto, hasta la fecha se pensaba que las civilizaciones tan solo iban a los trópicos a morir. Sin embargo, ciudades como Valeriana demuestran que esta parte del mundo también fue el hogar de culturas ricas y complejas como la maya. ¿Y qué llevó a esta ciudad al colapso? A pesar de que por el momento no se sabe a ciencia cierta, todo apunta a que el cambio climático pudo ser uno de los factores que llevaron a sus habitantes a abandonar la región.
Hacia una nueva investigación
A raíz de esta investigación, los responsables de este estudio señalan que Valeriana fue una ciudad que contaba con una superficie de 16,6 kilómetros cuadrados. Una ciudad, con dos plazas centrales, que se caracterizaba por varias pirámides en la que sus habitantes veneraban a sus dioses. Por otro lado, Valeriana contaba con un estadio, en el que algún día se jugó a un antiguo juego de pelota extinto, e incluso un embalse para abastecer a sus vecinos y vecinas. Por lo tanto, en una futura investigación de la ciudad podrían encontrarse muchos más pistas acerca de esta civilización y sobre cómo era su día a día.
Tras esta primera fase de la investigación, los investigadores deberán sumergirse en una nueva que consiste en adentrarse en la zona y analizar más sobre la misma: "Estar sobre el terreno y tener una idea de cuándo se construyeron y ocuparon los edificios nos ayudará a entender cómo se fueron alterando los asentamientos con el tiempo".
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...