La metamorfosis de Noja: pueblo en invierno, ciudad en verano

Noja (Cantabria)

Noja (Cantabria) tiene 2.500 habitantes censados pero no son fáciles de encontrar. Se camuflan entre los miles de veraneantes que durante varios meses al año abarrotan las playas de este municipio cántabro. Este es el municipio de España con más viviendas de “uso esporádico”, según la denominación del INE: más de 50% de las viviendas de la localidad son segundas residencias. En cierta medida, Noja es un pueblo con aspecto de ciudad. Durante el año dar un paseo por allí es hacerlo por una ciudad fantasma: comercios cerrados, persianas bajadas y avenidas sin coches. Pero, durante los meses de verano el pequeño pueblo cántabro llega a alcanzar picos de más de 80.000 habitantes, una población mayor que la de muchas capitales provinciales.

La mayoría de las viviendas son propiedad de ciudadanos vascos que tienen allí un piso donde pasar sus vacaciones. La Encuesta de Turismo que publica el INE cada tres meses confirma que Noja es el lugar que concentra un mayor número de visitantes vascos. La explicación de que tantos vascos tengan casa en Noja está en las liquidaciones y los finiquitos del sector industrial en Euskadi. Planificar los servicios públicos de un municipio que tiene un vaivén de población tan grande entre unos meses y otros se torna una tarea compleja: el centro de salud, las fiestas o los policías locales, que son muchos en invierno y pocos para el verano.