Caparrós y Alfaro rinden "pleitesía" a Jesús Navas tras anunciar su marcha del Sevilla: "Coge el currículum y nos lo restriega por la cara a todos"

El sevillismo ya se prepara para despedir a su capitán. Jesús Navas anunció este jueves que está encarando sus últimos días en el club, del que saldrá a final de temporada. Ya pudo vérsele emocionado a la conclusión del último partido de su Sevilla FC este miércoles frente al Cádiz CF, y él mismo se encargó de confirmar los presagios a la mañana siguiente, primero comunicando su decisión a sus compañeros y después haciéndolo público en las redes sociales del equipo. Las muestras de respeto y cariño se han sucedido al instante, entre ellas las de dos excompañeros como Joaquín Caparrós y Pablo Alfaro, quienes se han pasado por los micrófonos de 'El Larguero' para poner en valor la figura de un Navas que finaliza su etapa como una leyenda.

El periodista de la Cadena SER Santi Ortega fue el primero en alertar de esta posibilidad en la noche del miércoles y volvió a explicar lo sucedido en aquellos momentos. "El futbolista estaba en el vestuario después del partido del Cádiz y seguía llorando y desencajado", insistió, además de añadir que después de pasar la noche llamó al presidente, José María del Nido Carrasco, para pedirle que acudiese al vestuario en el entrenamiento posterior y escuchar el mismo mensaje de despedida que comunicó al resto de la plantilla. Su 'adiós', sin embargo, no implica que cuelgue las botas. De hecho, en los planes del futbolista estaría continuar en activo una última temporada -con la opción de ir a la Eurocopa de por medio- en un destino 'exótico'.

Al conocer la noticia, el propio Del Nido asumió que era "un día triste para el sevillismo". "Ya estamos pensando en cuándo y cómo volverá Jesús", amplió, además de confirmar que Navas tiene las "puertas abiertas" para regresar en el futuro.

Alfaro: "Ojalá el sevillismo lo tenga siempre como ejemplo"

También descolgaron la llamada de 'El Larguero' dos sevillistas de cepa como Joaquín Caparrós, su primer entrenador en la élite, y Pablo Alfaro, capitán de aquel Sevilla del año 2003. "Los que lo hemos tenido de chiquillo... Verle en ese comunicado que ha hecho te llega y te duele. La vida de un profesional es así y algún día uno tiene que decir que lo deja. La pena es que hubiese sido bonito que se hubiese retirado en el Sevilla, en su equipo, porque todavía le queda rendimiento. Casi seguro que el seleccionador Luis de la Fuente lo va a llevar a la Eurocopa y eso es señal de que puede dar rendimiento", señaló en primer lugar su primer técnico, quien no esperaba esta decisión hasta ver cómo se sucedieron los acontecimientos en las últimas horas.

El "niño", como le llamaron cariñosamente sus dos excompañeros, destacó desde sus inicios por su menudez y su introversión. "El míster me obligó a estar con el niño. El doctor Escribano le hacía tener chucherías en la mesilla para ganar peso, y los demás podíamos comer dos trozos de lechuga y una zanahoria", desveló Alfaro en esta llamada, antes de mostrar la talla de Jesús Navas como profesional. "Ha sido así desde el principio, muy introvertido, muy de los suyos... Es una leyenda y un grande el futbol mundial. Coge el currículum y nos lo restriega por la cara a todos. Casi hay que rendirle pleitesía. Se nos va un trocito del escudo, porque al final Jesús nunca dio una declaración altisonante ni un reproche a nadie", resaltó, deseando que "ojalá el sevillismo lo tenga siempre como ejemplo".

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Le cogió el testigo en este sentido Caparrós, quien contó una anécdota que bien muestra los valores del ahora lateral: "'Jesús, cuando meta usted un gol venga aquí y cabréese conmigo'", admite que le decía en privado, aunque el jugador nunca mostró esa cara. "Es un espectáculo de chaval y un lujazo haberle entrenado", llegó a comentar, además de recordar a todos los de su exitosa quinta, de la que ya solamente queda en el club Sergio Ramos.

"Un futbolista con esa calidad y ese talento... Si está predispuesto y ve que su rendimiento también es alto, tiene unas condiciones con un cambio de ritmo y una velocidad que para un delantero era un chollo. Cuando llegaba a banda sabía si te la tenía que poner por abajo o por arriba, era una garantía", reflejó, en cuanto a su readaptación del extremo al lateral.

Quien cerró esta charla fue Pablo ALfaro, que todavía tuvo unas palabras para valorar su "puntito de humildad". Este tipo de futbolistas, concluye, "se han ganado el derecho a decidir cuándo marchar": "Los demás tenemos que aplaudir y acordarnos de ellos siempre".

El Larguero, completo:

Este contenido está extraído del último podcast de 'El Larguero', presentado por Manu Carreño. Aquí puedes escuchar el programa completo.