"Es mejor prevenir": sale adelante una de las primeras sentencias que logra proteger a una menor ante la violencia vicaria

Posiblemente esta sea la primera sentencia que pueda lograr prevenir un caso de violencia vicaria. Y es que, lo que busca principalmente esta resolución y la jueza que la ha dictado, es la integridad y seguridad de una menor que pueda derivar en un caso de violencia vicaria. A pesar de que se trata de la primera instancia judicial, en la que a partir de ahora caben diferentes recursos, es un gran paso para la seguridad de esta niña y más menores. Uno de los motivos que empujan a la jueza sustituta de este juzgado a dictar la sentencia es la mirada y perspectiva "bastante vanguardista", que el juzgado de primera instancia nº19 de Barcelona tiene, según afirma Pedro Jiménez. Pero el eje principal sin duda es que se pone al menor en el centro, y se toman las decisiones judiciales teniendo el cuenta los intereses superiores de los menores.

En este caso, en lo que se basa la jueza sustituta, es en los informes periciales psicológicos y en las declaraciones de una menor de 11 años. Se trataba de una relación, en la que la madre sufrió episodios de violencia machista. Hubo una causa penal abierta que acabó en una absolución por la no ratificación de la madre en el último momento. En este punto, el agresor resultó absuelto y el procedimiento civil seguía abierto. Ante esta situación, se dicta la sentencia con la que se salvaguarda a la menor con la prohibición de las visitas del padre y con una orden de alejamiento de 500m. Otra causa que consigue lograr esta sentencia tan "vanguardista" fueron los informe psicológicos periciales que alertaron de "un cambio de 180 grados en la conducta de la menor en el momento que se volvía a reanudar el régimen de visitas con su padre".

La seguridad e integridad de los menores en posibles casos de violencia vicaria

Lucía Avilés, magistrada y experta en violencia de género asegura que "desde luego es un ejemplo claro de como se pueden hacer las cosas de una forma en la que se pone en el centro los intereses del menor". "Al fin y al cabo los magistrados y jueces somos garantes de derechos y tenemos que entrar pendientes de cuales son los intereses que pueden beneficiar o perjudicar a los menores", añade. En casos como este se puede observar como las relaciones de muto acuerdo pueden esconder ciertas conductas de violencia vicaria con la que se busca hacer daño a las madres a través de la violencia directa con sus hijos. Avilés precisa que la violencia vicaria además "no son solo los infanticidios sino que la violencia económica, abusos sexuales o psicológicos son también lo son".

La magistrada preguntada por el derecho de los padres agresores a poder ver a sus hijos en casos de separaciones contesta que: "Es mejor prevenir un riesgo que puedan tener los menores ante situaciones como esta". También puntualiza que gracias a sentencias como esta se puede rescatar un contexto de violencia machista que no pudo ser acreditado mediante un proceso penal y que ahora se va a poder lograr salvaguardar al menor de un empeoramiento de la situación. Insiste en que gracias a la sentencia de este caso lo que se pretende es: "Mantener la rutina de la menor y su propio beneficio en todo momento".

respecto al proceso jurídico, explica que lo que busca justamente este tipo de sentencias es poner en marcha un proceso penal en el que se buscan adoptar unas medidas civiles necesarias que suspendan cuanto antes el régimen de visitas de los padres agresores a los menores en situaciones sospechadas o evidenciadas de violencia de género. "Este contexto se ampara en la recién modificada Ley de protección integral de la infancia y adolescencia", explica Avilés.

Finalmente, la experta en violencia de género recuerda que también hay otras maneras de garantizar la seguridad de los menores. En otros casos en los que no se adoptan medidas como esta sentencia se procede al uso por los puntos de encuentro. Esta es otra forma de garantizar la integridad física de los menores en situaciones de violencia machista, pero la magistrada lamenta que: "La situación de los puntos de encuentro en España están muy masificados y además faltan medios y personal". Además, esta situación empeora con "los desplazamientos obligados de muchas familias a estos puntos de encuentro, que en muchas ocasiones suponen grandes gastos en casos de madres guardadoras".

83.000 casos activos con menores en vulnerabilidad

La estadística oficial del Ministerio del interior refleja que ahora mismo existen 83.000 casos abiertos de mujeres maltratadas con menores a su cargo con riesgo de vulnerabilidad. Sin embargo, la situación es mucho mas grave ya que de todos estos casos, 1.444 tienen a menores con situaciones muy altas de sufrir violencia vicaria por parte de padres agresores. Según recoge la estadística, los datos más alarmantes son que desde 2019 hasta ahora ha llegado a haber aproximadamente unos 4.000 casos de menores en situaciones graves de violencia. Además, la estadística también refleja que desde el año 2013, 60 niños menores han muerto asesinados por sus padres en casos de violencia vicaria.