Qué hay detrás del 'hongo' que se ha descubierto en Marte y cómo ha llegado hasta ahí: la NASA explica cómo ha sido posible

Madrid

Hace ya varios años, concretamente en 2022, el rover Perseverance de la NASA tomaba una fotografía durante su travesía que llamaba considerablemente la atención de los investigadores e investigadoras que siguen cada uno de sus pasos. Todo ello porque detectaba lo que parecía un hongo que se asemeja considerablemente a los que hay en nuestro planeta. A pesar de que a día de hoy hay algunos científicos que defienden la teoría de que se pueden desarrollar hongos sobre la superficie de Marte, lo cierto es que todavía no se ha podido probar y todo apunta a que tardaremos varios años en salir de dudas.

De ahí que la imagen en cuestión llamara tanto la atención, pues era el primer indicio de lo que parecía una seta marciana. Sin embargo, la NASA ha explicado varios años más tarde que este 'hongo' no es lo que muchos pensábamos que era. En una de sus últimas publicaciones en su página web, la agencia espacial ha explicado que este pequeño 'hongo' de entre uno y dos centímetros de alto que se descubrió por primera vez en el área de Hogwallow Flats no es más que una roca que nos permite conocer un poco más las características de la la región de Jezero.

¿Cómo es posible?

Al parecer, las rocas que podemos encontrar en esta zona del planeta rojo son mucho más finas que las habituales y destacan por tener una mayor proporción de sales de sulfato que el resto. ¿Y cómo ha desarrollado esta forma tan característica? Tal y como ha dado a conocer el doctorando Hemani Kalucha, como consecuencia de una característica geológica conocida como concreción. En resumidas cuentas, las concreciones son masas sólidas dentro de una roca que se forman a medida que el agua fluye a través del sedimento, lo que provoca que se disuelva poco a poco el mineral y que este se forme de nuevo con una configuración más sólida y compacta.

Tal y como explica el investigador, las concreciones suelen ser más duras que la rocas comunes, por lo que son menos vulnerables tanto a la erosión como a la intemperie y tienen más facilidad de mantenerse de una sola pieza con el paso del tiempo. Un fenómeno que también podemos encontrar en la Tierra, donde se presentan en una amplia variedad de formas y tamaños. ¿Y cómo es posible que se haya mantenido de esta guisa durante tanto tiempo? Según cuenta el investigador, el viento que ha azotado la superficie de Marte durante miles de millones de años tiene la culpa.

La historia detrás de las concreciones

Durante todo este tiempo, el viento ha ido erosionando el lecho de la roca porque era mucho más endeble que la parte superior. Sin embargo, no ha podido con la concreción que se ha formado en la parte superior de la misma, provocando así esta forma de seta tan característica. De hecho, la NASA también ha encontrado otras piedras con formas de disco, esféricas e incluso puntiagudas que son posibles gracias a este proceso.

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En caso de que el rover Perseverance traiga de vuelta estas muestras a la Tierra, la NASA podrá investigar las concreciones marcianas y cómo se formaron. No obstante, todo apunta a que surgieron gracias al agua que alguna vez hubo allí.