Málaga 2024 | Carmen Machi y Antonio de la Torre protagonizan un sainete lleno de humor negro contra la Guerra Civil y la violencia

Málaga

A pesar de las fake news que algunos se empeñan en lanzar sobre el cine español, a nuestra industria le cuesta tratar la Guerra Civil española. Es curioso que, teniendo la mejor literatura sobre el conflicto y la mejor historiografía, al cine le haya costado contar aquel periodo. Por eso es significativo el acercamiento que propone Clara Bilbao en su ópera prima, Tratamos demasiado bien a las mujeres, una comedia negra sangrienta que cuenta con los mejores actores del cine actual, entre ellos, Carmen Machi y Antonio de la Torre. Son las bazas de esta película que se ha presentado este domingo en el Festival de Málaga.

El guionista Miguel Barros ofreció el guion a Clara Bilbao, directora de vestuario, y ella, que había rodado varios cortos, decidió dar el salto, con la producción de Mateo Gil, con quien ella realizó el vestuario de varias películas. "Me envió este guión hace ocho años y me flipó. Y me dijo es de Miguel Barros, pero la voy a dirigir yo. Y digo, ¿perdona? Clara es una mujer de armas tomar y lo entendí perfectamente", cuenta la actriz sobre su llegada al proyecto, cuenta la actriz sobre esta adaptación de una fabulosa novela de Raymond Quenau, un escritor que como Max Aub, jugó con la ficción, con los lectores y con su compromiso político. "Yo conocí a Clara en un festival de cortos donde le dimos un premio, yo le insistí mucho porque me parece que tiene un universo y le dije que si hacía una película que me llamara. Le suplico curro a todo el mundo", decía divertido el actor.

La película traslada la acción de la Irlanda revolucionaria a la España de 1945 en el Valle de Arán. Allí unos guerrilleros republicanos llegan a un pueblo tomado por los franquistas, creyendo que están ya en la frontera con Francia. Toman una estafeta de correos, mientras deciden cómo llegar a las montañas, pero se encuentran con una novia facha que quiere destruirlos. Una mujer que va a casarse y acude a recoger su vestido y a probárselo, mientras tiene la oportunidad de salvar a España.

Si en la novela original eran siete irlandeses armados los que asaltaban el local mientras resistían al ejército inglés, aquí son siete republicanos, maestros, sastres, poetas, obreros, todas las profesiones que el Franquismo quiso aniquilar. Y ahí está Carmen Machi, dispuesta a seducir a todos para acabar con ellos. Nunca se explicó el quintacoluminismo mejor. "Tiene todo este aspecto de surrealismo también, pero a la vez es arriesgado hacer comedia. Yo siempre he visto el peligro de creerte que estás haciendo comedia, cuando eres consciente de que la estás haciendo, la cagas. El humor negro roza casi siempre la tragedia, porque son momentos muy trágicos y extremos de drama", cuenta Antonio de la Torre. Luis Tosar, Isak Férriz, Oscar Ladoire, Julián Villagran, Diego Anido, son esos hombres que tratan de sobrevivir en un mundo desolado por la guerra y el fascismo, donde la palabra de cada uno de ellos y las teje manejes del personaje femenino, permiten hacer un relato de todo el país.

Divertida, grotesca y tremendamente política, la película bebe del esperpento de Valle Inclán, del surrealismo de Cuerda y del humor desencantado de Berlanga, para hacer una crítica a la violencia, a la guerra y a la división entre vecinos. “A mí me parece también muy tarantiniano", apunta de la Torre. Clara Bilbao logra algo difícil en los relatos sobre la guerra civil y es que no sea equidistante. De hecho, una de las frases del filme se refiere a ello. "Vosotros nos pusisteis en esta situación", dice uno de los maquis a los franquistas que quieren fusilarlos, mientas ondea todavía la bandera republicana.

"Es verdad que el contexto es en la Guerra Civil, pero yo creo que no va de la Guerra Civil, está ahí ese episodio de la invasión del Valle de Arán que tuvo algo de patético realmente. Hablamos de esas dos Españas pero realmente se está hablando también de algo que hace referencia al propio título y es este paternalismo hacia la mujer. Ella tiene muy claro que tiene una misión que cumplir en este mundo y los hombres son una panda de inútiles, es una mujer bastante empoderada. Hay algo muy moderno en todo eso y se utiliza el contexto de la Guerra Civil, pero creo que habla de muchas más cosas. Es una metáfora increíble", cuenta Machi que se adueña de una película que sigue apelando a temas y problemas que no se resolvieron, ni en la posguerra ni en la Transición. La convivencia, el odio, la falta de empatía entre vecinos o la lucha por un país mejor.