Sundance 2024 | 'Reinas', la coproducción española con Susi Sánchez en el Perú de Fujimori

Madrid

Lo íntimo y lo político se entrecruzan tanto que a veces es difícil saber si una familia estalla internamente o es el contexto lo que hace que todo se desestabilice. Ese es uno de los temas que trata Reinas, película de la directora peruana y suiza Klaudia Reynicke, que cuenta con producción española y que compite en el Festival de Sundance. Reinas es una historia sobre identidad, sobre la familia y sobre inmigración. "Siempre me han atraído las dinámicas familiares y todas mis películas tienen que ver con eso de manera diferente". Yo nací en Perú. Soy peruana. Pero vine a Suiza a los diez años. También soy suiza. Luego me fui a Estados Unidos con 18 años. Esos tres países componen una parte de mi personalidad. Mi casa, la familia siempre ha sido más que cualquiera de los países. Por eso me interesa la familia como sujeto y el reto de cómo abordarlo, porque no podemos escapar de ello. O nos refuerza o nos hace más débiles", explica la directora en una entrevista en la Cadena SER, antes de partir a Park City, donde se celebra el certamen.

"Antes de entrar en el videoclub, siempre buscaba el logo de Sundance en las películas, porque así sabía que iban a ser buenas. Siempre ha sido una referencia, porque muchas de las películas que han salido de él han sido, son películas que adoro. Todavía no me creo estar seleccionada aquí", cuenta sobre la importancia de competir allí, junto a películas de diversos países y con la posibilidad de que ojeadores de todo el mundo, sobre todo americanos, puedan fijarse en esta historia que nos lleva al Perú de 1992, con Fujimori en el poder, con los militares en las calles y con las acciones de Sendero Luminoso. También con infinidad de familia de clase media tratando de irse del país al extranjero, entre ellas, la de la propia directora, que salió de Lima con 10 años y ha regresado a rodar esta película. "Nosotros nos fuimos en esa época, más o menos, por las mismas razones. Todo lo que aparece, los apagones, el toque de queda, son mis recuerdos de Perú. Recuerdos que yo tenía y que he reproducido de esta forma, porque para mí Perú era eso. Ahora he regresado de y he descubierto otro país", explica.

Reinas cuenta la historia de dos niñas, hermanas, que apuran los días que les quedan en su ciudad, junto a sus amigos y sus familiares. Se han mudado a casa de la abuela, Susi Sánchez, que cambia el acento en este papel, y allí hacen la maleta, al tiempo que se despiden de su padre, un tipo ausente que, en estas semanas, pasa más tiempo con ellas. Mientras, la madre, persigue a su ex marido para que firme los papeles y que las niñas puedan salir del país. En medio de todo ello, conocemos el mercado negro, la persecución política a los sospechosos de ser de izquierdas o la violencia desatada en las calles. "Nosotros nos fuimos en esa época, más o menos, por las mismas razones. Todo lo que aparece, los apagones, el toque de queda, son mis recuerdos de Perú. Recuerdos que yo tenía y que he reproducido de esta forma, porque para mí Perú era eso. Ahora he regresado de y he descubierto otro país. Pero para mí era importante reproducir el país que estaba en mi memoria. En realidad, ese tipo de conflictos es algo que se reproduce constantemente en muchos países, porque la historia se repite. La inmigración es algo universal, sobre todo para los países latinoamericanos, donde un país de repten va bien diez años, pero después vuelve a caer. Es algo que pasó en los años 90, pero que puede suceder hoy en cualquier país. La película habla también de lo complejo que es irse y dejar todo".

De hecho, ese proceso de emigrar, de vivir fuera, de configurar otra identidad, es algo que vimos en Sundance justo hace un año, con Vidas pasadas, una de las películas de esta temporada de premios. En un mundo líquido, globalizado, la identidad se define de manera diferente y se configura como un asunto primordial. La familia es quien suple esa identidad. "Quería regresar al país, a las raíces, pero no como una turista, no para ir a visitar a familiares una semana y volverme. Lo que quería realmente era regresar con un proyecto y poder colaborar con gente del país. Me fui de niña y siempre he tenido las ganas de hacer algo allí y de redescubrir el país de esa forma. Reinas, en verdad, que también me sirvió para poder conocer a mucha gente, descubrir el país con ojos de adulta y crear nuevas memorias".

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La película nos lleva por las calles de Lima, a la playa, nos mete en las casas y en los dilemas de una adolescencia y de la niñez. Conflictos que se acentúan en esos días donde todo, en las calles y en la casa familiar, se convierte en una olla exprés. "Me interesaba la intensidad de este tipo de momentos que hace surgir cosas inesperadas. En toda familia que se va a ir, las semanas previas, se producen cosas en este sentido. Obviamente depende del contexto, aquí tenemos a una adolescente, a una niña, a una madre con un sueño y a un padre al que simplemente no conocen. Todos llegan a recrear un tipo de familia en esos días previos", cuenta la directora.

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En realidad, el viaje del personaje paterno, protagonizado por el actor peruano Gonzalo Molina, es el de un hombre que debe aprender a ser responsable de su paternidad, un viaje complejo que muchos hombres han realizado, mientras otros han seguido ausentes o respondiendo a un patrón violento. "El aprendizaje de este señor no es algo fácil. Me imagino que a un hombre así, que ha decidido mirar para adelante y no para atrás, este proceso no es fácil. Simplemente dejar a los demás, porque en este caso tomar responsabilidad es hacer lo mejor para ellas. Eso me interesaba, un padre ausente, existen muchos la vedad, quizá en nuestra generación menos, pero hay muchos casos, mucha gente me dice que su padre desapareció tras un divorcio".

"Tenía experiencia ya en trabajar con niños, pero nunca habían sido protagonistas. Hicimos un casting y finalmente encontré a la niña en un centro comercial. Después para la chica adolescente, fue la hija de mi coguionista. Llevaba un año con el casting y no encontraba y al final, convencí a la niña para que viniera con una amiga a hacer la prueba. Obviamente trabajar con niños tiene sus limitaciones, solo trabajan seis horas al día, hay que acercarse a ellos para crear cierta intimidad. Hay que ser más cuidadoso y plantear todo como un juego. No puedes pasar directamente a la meta. Nosotras nos íbamos a la playa, hacíamos cosas fuera del rodaje para lograr esa confianza. Íbamos hablando del personaje y así se creó el ambiente".

Jimena Lindo interpreta a la madre, una mujer que decide aceptar un trabajo fuera y cumplir también su sueño profesional, en un momento donde no era tan fácil que las madres de familia pudieran tomar esas decisiones. Abril Gjurinovic es la niña y Luana Vega la adolescente. "Tenía experiencia en trabajar con niños, pero nunca como protagonistas. Hicimos un casting, pero finalmente dí con la niña en un centro comercial. Sobre la adolescente, al final recurrí a la hija de mi otro guionista, Daniel, a la que convencí para venir a una prueba con una amiga. En realidad solo tienes que saber que hay que trabajar de otra manera, no más de seis horas por día, y creando confianza y cercanía. Nosotras nos íbamos a la playa y hacíamos cosas fuera del rodaje para coger esa intimidad".

UNA COPRODUCCIÓN CON ESPAÑA

Klaudia Reynicke debutó con El Nido, con ella y con su segunda película, Love me tender, estuvo en Locarno. Ha rodado también la serie La vie devant, y ahora ha configurado Reinas, una coproducción española, suiza y peruana. Valérie Delpierre, responsable de títulos como Verano 1993, de Carla Simón, Las niñas, de Pilar Palomero, o 20.000 especies de abejas, de Estíbaliz Urresola, apuesta por apoyar esta historia que cuenta con la actriz madrileña Susi Sánchez, que estará también en Sundance. "La productora mayoritaria es Alba Films, que es suiza. Queríamos una coproducción con España y apareció Valérie. También estamos produciendo con Perú. Lo interesante del proyecto fue tener a gente tan diferente. Había peruanos que nos ayudaron mucho, también españoles y los suizos, juntos estuvimos unos tres meses. España aportó también a Susi Sánchez, que estoy muy feliz de haberla tenido y a mi primer asistente de producción. Es lo bueno de las coproducciones, que conoces cómo funciona cada país".