El 'Monstruo de Amstetten' intenta no morir en la cárcel
Josef Fritzl, que mantuvo a su hija encerrada en un sótano durante 24 años, ha apelado la sentencia que le condena a cadena perpetua por su estado de salud
Josef Fritzl durante el juicio en el año 2009 / Handout
En el año 2008, el austriaco Josef Fritzl fue condenado a cadena perpetua e internamiento psiquiátrico por mantener en un sótano a su hija durante 24 años y por violarla continuamente durante ese tiempo. Una sucesión de crímenes que derivó en el nacimiento de siete niños y que alcanzó una gran repercusión mediática cuando fue destapado después de que la víctima fuera trasladada a un hospital por encontrarse gravemente enferma y descubrirse en ese momento el calvario que había sufrido. Una vez condenado, Fritzl ingresó en una prisión austriaca de máxima seguridad.
Fritzl tiene ahora mismo 88 años y los informes médicos que se le han venido realizando confirman que padece demencia, a pesar de que recientemente su abogada ha publicado una biografía que es resultado de sus conversaciones con él y de textos del propio Fritzl. Un libro en el que, además, no muestra ningún arrepentimiento.
En base a uno de esos informes psiquiátricos, que argumenta que a sus problemas de salud mental se sumarían otros de movilidad y que Fritzl ya no supone un peligro para otras personas, su abogada ha solicitado que salga de prisión. La firmante de ese informe es la misma psiquiatra que en 2009 determinó que su comportamiento era "psicológicamente anormal y emocionalmente analfabeto".
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Ahora, un tribunal deberá determinar qué hacer con este asesino en un caso que ha vuelto a reaparecer en los medios austriacos, que recuerdan además que en 2022 se desestimó que pudiera dejar de cumplir la condena que cayó sobre él hace 16 años. La abogada de Fritzl, Astrid Wagner, argumenta que el sistema penitenciario austriaco no tiene la capacidad de atender a presos con demencia, por lo que directamente solicita su puesta en libertad.
La hija de Fritzl, Elisabeth, adoptó una nueva identidad después de que su padre fuera condenado, y no se puede revelar ni ese nuevo nombre ni el lugar en el que reside. Josef cambió también su apellido hace algunos años, aunque en todo el mundo el nombre de Amstetten sigue vinculado a su rostro y a sus crímenes.
Antonio Martín
Redactor de la sección de Internacional. Se incorporó a la Cadena SER en 2005 y desde entonces ha formado...
