"Venís a esquiar y comprar perfumes, nosotras salimos para abortar"

El lunes por la mañana se va a celebrar un juicio contra la presidenta de Stop Violèncias, Vanessa Mendoza Cortés, su delito: dar a conocer el informe que había elaborado desde su asociación sobre la situación de los derechos de las mujeres en Andorra, donde el aborto está prohibido y penado con hasta 4 años de prisión. Mendoza Cortés leyó el informe ante la 74 sesión de la Convención sobre la Eliminación de toda Forma de Discriminación contra la Mujer (CEDAW siglas en inglés) de Naciones Unidas. El lunes la juzgan por «difamar a las autoridades del país» (art.325 de Código Penal andorrano) pero justo después de la intervención de Vanessa ante la CEDAW las autoridades andorranas presentaron una denuncia contra ella argumentando que sus declaraciones afectaban al prestigio del Gobierno. Meses después la Fiscalía pidió abrir diligencias previsas contra Vanessa Mendoza Cortés por los presuntos delitos de «calumnias hechas con publicidad», «calumnias contra los copríncipes» y delitos contra el prestigio de las instituciones«. En 2021 el fiscal retiró los dos primeros cargos, los más graves, que podrían suponer condenas de prisión. »Andorra es una teocracia misógina« dice Vanessa en alusión a que uno de los copríncipes es el obispo de la Seu dUrgell. El informe que se había elaborado desde Stop Violències era conocido dentro de Andorra, las autoridades lo conocían. »Otra cosa es cuando expones fuera la violencia que se ejerce sobre la mujer« la activista y psicóloga experta en violencias nos ha recordado que en su país, por ejemplo, no se considera delito la violación dentro del matrimonio. O nos ha contado las condiciones en las que abortan las mujeres que lo necesitan y la violencia a la que se ven sometidas por ello. »El aborto no es traumático, sino todo lo que lo rodea« dice al denunciar que muchas mujeres tienen que pedir créditos para hacer frente a las interrupcioes del embarazo fuera de las fronteras del principado. »No hay convenio con los centros sanitarios« y un aborto puede costar desde los 300 a los 8 mil euros. »Piden créditos personales al 15% para poder interrumpir su embarazo. Vanessa Mendonza también ha denunciado que cuando les dan las píldoras abortivas se las cobran hasta por 300 euros, cuando en realidad no cuestan más de 10 y les niegan la que facilita la expulsión, cosa que aumenta el riesgo y el sufrimiento de las mujeres. Vanessa Mendoza Cortés no va a estar sola en el juzgado el lunes, la acompañarán activistas de organizaciones feministas españolas, francesas. La comisaria europea de derechos humanos también ha expresado su solidaridad. Dunja Mijatovic, a través de un comunicado sostiene que este juicio «socava su libertad de expresión y tiene un efecto disuasorio en la labor de los defensores de los derechos humanos». Hemos hablado con Mónica Costa, Responsable de Campañas sobre Derechos de las Mujeres de Amnistía Internacional, que insiste en la linea marcada por la comisaria y añade que es una anomalía que se mantenga, en algunos países de la UE entre ellos España, el delito por difamación en el código penal.

"Venís a esquiar y comprar perfumes, nosotras salimos para abortar"

Vanessa Mendoza a juicio por contar el drama de las mujeres que quiere abortar en Andorra

Lourdes Lancho

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